[nettime-lat] [ATTAC] INFORMATIVO 67 - DEUDA VERSUS DESARROLLO

["El Grano de Arena" <informativo@attac.org>]

EL GRANO DE ARENA
Correo de informaci�n ATTAC n�67
Miercoles, 20/12/2000

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Este correo informativo ha sido elaborado por el equipo de
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En este n�mero. Breves

1. Asesinos de la democracia:
La falta de integraci�n social de los movimientos de los negros en
EEUU y su correlato brasile�o, los "Sin tierra"

2. Ecos de Niza:
Mientras que ATTAC- Suecia nace oficialmente en enero pr�ximo y se
apresta a organizar una manifestaci�n durante la primera Cumbre
europea bajo la Presidencia de Suecia, dos j�venes espa�oles son
condenados a un mes de prisi�n por haberles sido encontrado un peque�o
cuchillo clavado en un trozo de camembert.

3. Otra cr�nica:
Niza irrespirable, Una contribuci�n de un militante espa�ol

4. Dakar 2000, algunas alternativas: Contribuciones   al debate para
salir del ciclo infernal de la deuda y hablar en serio de desarrollo.
Estas propuestas resuenan con fuerza en momentos en que la Argentina
debe someterse a las gastadas recetas  del FMI y del BM.

5. Iberoam�rica: Paraguay, Uruguay, Argentina, problemas diferentes
pero ligados por un com�n denominador el abuso y la insensibilidad del
poder econ�mico y el sometimiento del poder pol�tico a los intereses
del capital.



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1.-Asesinos de la democracia
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 Emir Sader R�o de Janeiro

 En los a�os 60 y comienzos de los 70, el gobierno de Estados Unidos
se dedic� a liquidar el movimiento negro de aquel pa�s.

Los derechos civiles conquistados pon�an en movimiento una fuerza
social y cultural que resultaba muy radical para los patrones
norteamericanos y, en especial, para �pocas como la de la guerra de
Vietnam y la asunci�n de Richard Nixon.

 El movimiento negro fue liquidado, en todas sus vertientes, del
pacifismo de Mart�n Luther King al radicalismo de los Black Panthers,
pasando por Malcolm X. Apenas algunas d�cadas despu�s, la juventud
negra es diezmada por el crack, protagoniza abiertamente la crisis
social de la violencia urbana, llevando a que ciudades
predominantemente negras en la composici�n de su poblaci�n, como
Washington, tengan toque de queda permanente.

 Los negros hoy viven peor que en los a�os 60, desplazados de los
puestos de trabajo por los trabajadores inmigrantes, que son obligados
a trabajar en cualquier condici�n, por no tener la tarjeta de trabajo,
al contrario de los negros, rebeldes, pasibles de sindicalizaci�n.

 Habr�a sido mucho mejor para la construcci�n de una democracia con
alma social en los Estados Unidos, la convivencia -si bien que
dif�cil- con los movimientos negros, que representaban sus expresiones
pol�ticas organizadas, aquellas que daban racionalidad a sus
reivindicaciones. Lo peor son las expresiones desordenadas, en el
enfrentamiento violento con la polic�a, que lleva a gran parte de
ellos a ser parte de la mayor poblaci�n carcelaria del mundo, otros a
vegetar en los guetos urbanos de la droga, mientras otro sector sigue
la dif�cil lucha por la conquista de la ciudadan�a.

 Los Sin Tierra en Brasil

 Algo parecido sucede hoy con los "sin tierra" en Brasil. Las �lites
bien puestas se dedican a tratar de liquidar al movimiento que busca
rescatar la ciudadan�a de las personas m�s pobres, m�s humildes, m�s
masacradas del pa�s, con todo el peso de su fuerza. Gobierno, Polic�as
Militares, Ej�rcito, grandes medios de comunicaci�n, se juntan para
tratar de criminalizar al m�s bello y meritorio movimiento social que
la historia del Brasil haya tenido.

 Un movimiento que, conforme reconocen las Naciones Unidas en su
�ltimo informe sobre el Indice de Desarrollo Humano, con su lucha,
hace que un mill�n de personas tengan acceso a la tierra, contra la
voluntad de las �lites y de los gobiernos, que en 500 a�os, solo
concentraron la tierra y la protegieron con la violencia.

M�s a�n: en los asentamientos de los sin tierra, no hay un ni�o fuera
de la escuela, el �nico lugar en Brasil donde todos los ni�os est�n en
la escuela, en un sistema escolar formulado y organizado por ellos
mismos, con profesores pagados por las alcald�as, con un curr�culo
decidido por ellos, pero autorizado por el Ministerio de Educaci�n.
Como dice Jos� Claudio Todorov, responsable de alfabetizaci�n del
Ministerio: los sin tierra hicieron por la alfabetizaci�n en Brasil
m�s de lo que 500 a�os de historia.

 Es a este movimiento que las �lites conjugadas quieren destruir, para
que Par� vuelva a ser como era, seg�n testimonio de la Pastoral de la
Tierra de ese Estado: una zona del lejano oeste, donde los
trabajadores rurales eran masacrados cotidianamente, sin siquiera
constituir noticia en los peri�dicos. Quieren que proliferen
guerrillas rurales en Brasil, como en Colombia, como anhela el General
Alberto Cardoso (Ministro Jefe de Gabinete de Seguridad Institucional
de la Presidencia de la Rep�blica), deseoso de militarizar a�n m�s los
conflictos rurales en Brasil, al decir que los sin tierra van a
"apelar a otros medios". Si Brasil no se ha transformado en una
Colombia en el campo, no es gracias a los Cardosos y a su muchacho,
Ra�l Jungmann (Ministro de Desarrollo Agrario), sino gracias al
Movimiento Sin Tierra.

 �Es eso lo que quieren los asesinos de lo poco de democracia que
construimos? ?Es eso lo que quieren de nuevo, todos los magnates de la
gran prensa que -con la �nica excepci�n de Ultima Hora- apoyaron y
propagaron el golpe militar, escondieron sus cr�menes y actuaron
juntos en la dilapidaci�n del pa�s?

 Defender a los sin tierra en su lucha pas� a ser un certificado de
car�cter en el Brasil de hoy. D�game lo que piensa de los sin tierra y
yo le dir� qui�n es, de tal forma se presenta el combate entre pobres
y ricos, poderosos y d�biles, trabajadores y especuladores, pueblo y
�lites.

 Servicio Informativo "Alai-amlatina"
Agencia Latinoamericana de Informaci�n
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Suscripciones o desafiliaci�n:
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2. Ecos de Niza
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Luego de la manifestaci�n ciudadana para hacer escuchar la voz de los
pueblos del 7 de diciembre, el colectivo de la Contracumbre de los
Alpes Mar�timos conden� las provocaciones policiales que originaron
los incidentes, los arrestos arbitrarios y la violencia policial que
dej� un saldo de muchas v�ctimas (pese a que se quisieron tergiversar
los hechos) y record� que los poderes p�blicos violaron su propia
legslacion al impedir el acceso a Francia de 1500 manifestantes
italianos.

Los italianos de Ya Basta (unas 1000 personas) no pudieron pasar la
frontera italo-francesa argumentando que la empresa ferroviaria no
ten�a locomotoras disponibles para completar el viaje. �No habr�n
acaso querido impedir que los manifestantes italianos especialmente
entrenados en protestas pac�ficas den pruebas de su eficacia en
Francia? Parece imposible que esto haya sucedido en el pa�s de los
derechos del hombre.

Ocho j�venes espa�oles fueron tambi�n detenidos y dos de ellos
condenados a un mes de c�rcel y a 2 a�os de prohibici�n de volver a
Francia. La intervenci�n de los abogados de los organizadores oblig� a
la polic�a a retirar la denuncia, pero el fiscal dictamin� que se
trataba de dos j�venes dispuestos a enfrentar a las fuerzas del orden
por haber encontrado en uno de sus bolsos un peque�o cuchillo clavado
en un pedazo de queso. Fue evidentemente una condena ejemplarizadora y
no un ejercicio judicial.


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3. Otra Cr�nica
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 NIZA IRRESPIRABLE

 Enero 2000. Forum de Davos, Suiza: El presidente ex-comunista de
Polonia se encuentra rodeado de una horda de altisimos ejecutivos que
le inquieren acerca de las pr�ximas privatizaciones. Sin rubor alguno
y ante las c�maras, el directivo de una transnacional cualquiera exige
que las medidas sean inminentes y se lame los bigotes. El presidente
se defiende recordando que ya ha privatizado un 75% de las empresas
publicas, aunque reconoce que de todos modos es cierto que el sector
energ�tico ya esta maduro. Pero las hordas piden mas, est�n sedientas,
disfrutan viendo la presa acorralada. Entonces el presidente preso se
repliega un poco mas y en pleno s�ndrome de Estocolmo bromea: Pero a
ver, cuando ya este todo privatizado que les va a quedar por
privatizar? Entonces una hiena se alza entre las risas y propone: El
Gobierno!

 La historia, real, continua con risas crecientes y el presidente
comentando que si es por �l adelante, pero que tal vez algunos
ministros no est�n de acuerdo. Sirva como par�bola de la construcci�n
de la Europa actual, en pleno traspaso de poderes desde los
parlamentos hacia los consejos de administraci�n. Todo bajo las
directrices del Consenso de Washington, base te�rica de la expansi�n
avasallante de las grandes firmas norteamericanas, japonesas y
europeas, erigidas en due�as de la aldea global con el apoyo policial
de la hiperpotencia unipolar, EEUU. Por resumirlo de alguna manera.
Asi que a los pol�ticos no les queda de otra que acompa�ar sobre el
papel lo que ya esta pasando en la realidad. Y a eso se iba a Niza.
Ellos a firmar por la liberalizaci�n (a trav�s del art�culo 133) y el
recorte de derechos sociales (con la Carta de los Derechos
Fundamentales). Nosotros a intentar impedirlo.

 Los sindicatos y movimientos sociales de toda Europa marcharon
masivamente el d�a 6, con distintas agendas pero con una cr�tica
com�n, por algo se empieza. Fuimos 100000. El d�a siguiente �ramos
bastantes menos. Los sindicatos mayoritarios se volvieron para casa.
El Global Action Express que llevaba a 1500 italianos se quedo
bloqueado en la frontera por.. 4500 polic�as! Los que intentaron ir en
los trenes gratuitos franceses fueron gaseados en las ciudades de
partida. Pero de todos modos salimos a primera hora del jueves a las
calles, no muy organizados pero con ganas. Los enfrentamientos fueron
solucionados indiscriminadamente por la polic�a a chorros de gas
lacrim�geno. A un hombre que hablaba con la polic�a para informarse
sobre la situaci�n de los presos le echaron una bomba de gas en plena
comisar�a y sufri� un ataque de epilepsia. Los manifestantes que
fueron a la estaci�n central a protestar por la retenci�n de los
italianos fueron dispersados por los aprendices de Robocop, que
golpean sus escudos con las porras para dar mas miedo y darse �nimos.
Los militantes de Attac que trataban de "invadir" M�naco para
denunciar los para�sos fiscales tambi�n chocaron con las fuerzas del
desorden. La polic�a asedio con gas y c�nones de agua el palacio de
deportes que el Ayuntamiento habia cedido a ultima hora a los
manifestantes. Tensi�n y mal tiempo, pero sin decaida de �nimos, al
grito de Tous ensemble! (todos juntos) repetido a cada momento.

 "Un gran paso para la Europa de las empresas" esa era la portada de
Le Figaro el d�a despu�s de las revueltas de Ni�a. Asi que no solo no
conseguimos parar la cumbre, sino que adem�s los grandes "decididores"
siguieron reforzando a sus anchas las tesis ultraliberales que est�n
sirviendo de esp�ritu rector y aliento fundacional en la
reconstrucci�n de Europa, toda vez que se sigue despedazando el pacto
social que levanto la Europa de post-guerra. Aun as�, el politiqueo y
las disputas corporativistas no permitieron firmar en firme y por el
momento solo hay acuerdos no vinculantes. En cualquier caso las
decisiones se siguen y se seguir�n tomando, inexorablemente.
Decisiones que ratificaran lo que Tacher y Reagan no predicaron en el
desierto: Las fronteras cada vez cerraran mas el paso de las personas
y facilitaran el de las mercanc�as. Los organismos gen�ticamente
modificados iran encontrando su espacio a golpe de lobby. Las
decisiones iran derivando hacia las instancias tecnocr�ticas: comisi�n
europea, banco central europeo... Los para�sos fiscales y las plazas
burs�tiles seguir�n hinchando burbujas especulativas. La patronal
continuar� creciendo en Bruselas, Berl�n o Davos. Por no hablar de las
decisiones que no se tomaran, las que podr�an poner coto a esta era de
feudalismo transnacional y recuperar la pol�tica para los ciudadanos.

Pero no todo consiste en reventar cumbres internacionales. En Praga se
suspendieron las reuniones pero la riqueza sigue reconcentr�ndose
sobre su ombligo, los supermercados aun rebosan de tonter�as in�tiles,
los planes de ajuste contin�an aplic�ndose urbe et orbi (Europa
incluida, los criterios de convergencia hacia la moneda �nica no son
mas que planes de ajuste disfrazados), la banca sigue con incrementos
de beneficios del 20% anual y la deuda externa, el trafico de armas o
la cacer�a de inmigrantes siguen intactas. Por dar solo algunos
ejemplos. As� que lo mas importante de estas contra-cumbres, notas
disonantes de la globalizaci�n, no es romperle la madre a un alto
ejecutivo, sino "romper el gueto, salir del aislamiento" o sea, irnos
enredando en una gran red, nutrir un grito transcontinental. Y es que
a pesar del fregadero medi�tico, estas contra-cumbres son una buena
oportunidad para vernos y hacernos ver. En definitiva, encontrarnos en
espacios donde el dinero no mida el valor de las cosas y
desencontrarnos de las mentidas y la soledad. "Pr�xima estaci�n:
esperanza".

pere manel (by way of Enric <enricdur@menta.net>)
facilillo@hotmail.com ATTAC- Discussion


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4. Dakar 2000, algunas alternativas
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En la reuni�n sobre la Deuda externa que se realizara en Dakar entre
el 11 y el 15 de diciembre se consideraron algunas alternativas:

Garantizar a todos/as la satisfacci�n de las necesidades humanas
fundamentales.

Seg�n la Declaraci�n de los Derechos del Hombre: "Toda persona tiene
derecho a un nivel de vida que le permita preservar su salud, su
bienestar y los de su familia, especialmente en lo referido a la
alimentaci�n, el vestido, la vivienda, los cuidados m�dicos as� como
el acceso a los servicios sociales b�sicos. Toda persona tiene derecho
a la educaci�n, al trabajo y a la seguridad social. Por lo tanto " El
ebrio nav�o de la mundializaci�n" muestra como son de alucinantes los
d�ficit en t�rminos de desarrollo humano.

Seg�n el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, ser�an
necesarios solo 40.000 millones de d�lares anuales, durante diez a�os
para garantizar a cada uno de los habitantes de la tierra el acceso a
los bienes y servicios b�sicos. "El costo de la provisi�n y el
mantenimiento del acceso universal a la educaci�n b�sica, a los
cuidados de la salud elementales, a una adecuada alimentaci�n, al agua
potable y a infraestructuras sanitarias, como el acceso de las mujeres
a la atenci�n ginecol�gica y obst�trica ha sido estimado en 40.000
millones de U$S por a�o, lo que representa menos del 4% de la riqueza
acumulada en 225 grandes fortunas (PNUD, 1998, p�g.33) y si bien no lo
dice expresamente deja entender que un impuesto del 4% a las 225
personas m�s ricas del mundo bastar�a para garantizar el acceso
irrestricto a los servicios fundamentales. Relacionado con otros
gastos la suma mencionada equivaldr�a al 5% de los gastos militares y
al 4% de los gastos mundiales anuales en publicidad.

Es imposible esperar de la l�gica del mercado y de sus beneficios que
satisfagan estas esenciales necesidades. Los 1,3 mil millones de
personas que no disponen de agua potable y los 2mil millones de
an�micos no disponen de poder de compra suficiente. Solo resueltas
pol�ticas p�blicas podr�n garantizar la aplicaci�n de la Declaraci�n
Universal de los Derechos del Hombre y por lo tanto es necesario que
los poderes p�blicos dispongan de los medios pol�ticos y financieros.
Esto no se lograr� sin un poderoso movimiento social y ciudadano a
favor de medidas concretas a aplicar. He aqu� algunas posibilidades
para resolverlas:

Quebrar el infernal ciclo de la deuda

Los defensores de la mundializaci�n liberal nos explican que los
pa�ses en desarrollo (incluyendo a Europa del Este) deben reembolsar
su deuda externa si quieren seguir recibiendo flujos financieros desde
el exterior. En realidad luego del estallido de la crisis de la deuda
en 1982 los flujos se han desplazado de la Periferia hacia el Centro.
El mecanismo de reembolso de la deuda se agreg� a otros preexistentes
(desigual intercambio comercial, pillaje de riquezas naturales y
humanas) reforz�ndolos. Desde 1982 los pa�ses de la periferia han
trasladado a los acreedores del Centro (dejando a los capitalistas
locales sus correspondientes comisiones) importes equivalentes a
varios planes Marshall.

Se justifica por lo tanto asumir la contrapartida del discurso
oficial: es necesario anular la deuda p�blica externa del Tercer
Mundo. Si se analiza la deuda del Tercer Mundo (reembolsada cuatro
veces desde 1982) no es tan pesada frente a la deuda hist�rica,
ecol�gica y social que han contraido con este los ricos pa�ses del
Norte. La deuda de los pa�ses del Tercer Mundo (excluidos los pa�ses
del Este) llegaba en 1999 a alrededor de los 2060 billones de d�lares
(de las cuales el 75% son deudas p�blicas), que en realidad constituye
un peque�o porcentaje de la deuda mundial que alcanza los 40.000
billones de d�lares (solo la suma de la deuda p�blica y la privada en
los EEUU asciende a 15.000 billones de d�lares). Si la deuda p�blica
externa del Tercer Mundo fuera totalmente anulada, sin indemnizar a
los acreedores, esto representar�a una m�nima parte de solo el 05% de
su cartera. Mientras que contrariamente los pueblos liberados del peso
de la deuda dispondr�an de sumas considerables que podr�an ser
utilizadas en mejorar la salud, la educaci�n, crear empleos. El
reembolso de la Deuda Publica del tercer Mundo, en efecto, requiere
destinar alrededor de 200 mil millones por a�o, es decir cinco veces
la suma necesaria para satisfacer las necesidades humanas b�sicas
definidas por el PNUD.

Tambi�n se argumenta que un importante flujo de nuevos pr�stamos
contrabalancea el reembolso del Tercer Mundo. Falso. En 1999 el Tercer
Mundo transfiri� a los acreedores 100 mil millones m�s que lo que
recibi� como nuevos pr�stamos (que por otra parte no hicieron sino
aumentar el monto dela deuda)

Tambi�n es falso afirmar que el momto de la Ayuda P�blica al
Desarrollo (APD) neutraliza los efectos negativos del pago de la
deuda. En 1999 la suma total de APD no super� los 50 mil millones de
d�lares es decir seis veces menos que lo que pag� el Tercer Mundo en
el mismo per�odo como servicio de la deuda p�blica, Seg�n el BM, los
APD solo equivale a un 0,24% del PBI de los pa�ses donantes mientras
que la ONU fij� como objetivo el 0,7%. En realidad los APD bajaron un
33% entre 1992 y 1998, en escandalosa contradicci�n con los
compromisos asumidos por los Jefes de Estado de los pa�ses
industriales en 1992, en R�o de Janeiro.

Los antecedentes hist�ricos en cuanto a anulaci�n de deudas han
mostrado los ventajosos efectos que esto puede generar, especialmente
si se recuerda la anulaci�n del 51% de la deuda de guerra alemana en
1953, lo que permiti� a Alemania transformarse en la primera potencia
y locomotora de la construcci�n europea. Existen igualmente otros
antecedentes: la deuda del Estado ruso 1917, la deuda de los estados
suramericanos luego de la crisis de 1929, la deuda del Jap�n entre
1941 y 1952, la mitad de los cr�ditos del Club de Par�s a Polonia en
1991 y es evidente que los pa�ses mencionados obtuvieron importante
desarrollo luego de las medidas de anulaci�n.

Algunos agregan que la anulaci�n de la deuda llevar�a a la exclusi�n
del acceso de dichos pa�ses a los capitales internacionales. Esta
afirmaci�n no se fundamenta en ning�n estudio serio de las hist�ricas
crisis del endeudamiento. Adem�s no tiene ning�n sentido porque la
mayor�a de los pa�ses del Tercer Mundo hace rato que no tienen acceso
a dichos capitales. Seg�n el PNUD " solo 25 pa�ses en desarrollo
tienen acceso a los mercados privados para las obligaciones, los
pr�stamos de bancos comerciales y las inversiones de cartera" (PNUD,
1999, p.3) Es de destacar que el PNUD incluye entre los 25 pa�ses
mencionados a los estados del Este Europeo, mientras que el conjunto
total reune a 170 pa�ses.

Tambi�n es importante recordar el concepto de "deuda odiosa" del
Derecho internacional y que constituye una parte considerable de la
deuda del Tercer Mundo. �De qu� se trata? Una deuda es "odiosa" seg�n
el Derecho Internacional si fue contraida por un gobierno no
democr�tico y tampoco disfrutada por las poblaciones locales. "Si un
poder desp�tico contrae una deuda no seg�n las necesidades y los
intereses del Estado, sino para fortalecer su despotismo, para
reprimir a la poblaci�n que se le opone, esta deuda resulta odiosa
para toda la poblaci�n de dicho Estado. Esta deuda no es obligatoria
para la naci�n: es una deuda del r�gimen, una deuda personal de
quienes la contrajeron y por lo tanto cae con la ca�da del poder que
la gener�" (Williame, p�g. 186).

La responsabilidad es la de los acreedores en cuesti�n. La
jurisprudencia expresa que sustancialmente las deudas estatales deben
ser contraidas y utilizadas en inter�s p�blico, mientras que a los
ojos de los acreedores las que estamos considerando no cumpl�an con
este requisito. De modo que los acreedores han cometido un acto ilegal
con respecto a la poblaci�n, de modo que no pueden esperar que una
naci�n liberada del poder desp�tico asuma las deudas odiosas de
car�cter personal de dicho poder.

En t�rminos generales puede decirse que los banqueros del Norte y los
dirigentes del Banco Mundial que no reaccionan ante las
irregularidades cometidas en materia de costos, de planes arteros, de
contratos sospechosos, adoptan un comportamiento hostil con relaci�n a
la poblaci�n. Y por lo tanto la deuda debe ser considerada nula y no
contraida.

Para que la anulaci�n de una deuda sea �til al desarrollo humano, es
evidentemente necesario que las sumas destinadas hasta ese momento al
pago de la deuda sean depositadas en un fondo de desarrollo
democr�ticamente controlado por la poblaci�n local. Pero una vez
franqueado esta primer paso es indispensable sustituir esta econom�a
de endeudamiento internacional por otro modelo de desarrollo
socialmente justo y ecol�gicamente sustentable.

Un Fondo Internacional de reparaci�n para el Desarrollo,

Para responder al pillaje secular sufrido por el Tercer Mundo y con el
objeto de romper radicalmente con la l�gica actual es necesario pensar
en un Fondo Internacional de Reparaci�n hist�rica. Este fondo podr�a
conformarse varios modos:

Restituir a los ciudadanos del Tercer Mundo los bienes mal adquiridos
por las elites del Sur; considerables riquezas acumuladas il�citamente
por gobiernos y capitalistas locales han sido transferidas por razones
de seguridad a los pa�ses m�s industrializados con la complacencia
activa de las instituciones financieras privadas y la de los gobiernos
del Norte (movimiento que no se ha detenido). Pensemos, por ejemplo,
lo que representar�a para la poblaci�n congolesa, la restituci�n de
parte importante de los bienes de Mobutu (equivalente a diez veces el
presupuesto anual del estado congol�s)

Estos fondos mal habidos deber�an ser incorporados a un fondo de
desarrollo democr�ticamente administrado por esa comunidad. Esto desde
luego requiere que se realicen investigaciones sobre los haberes de
tales gobiernos depositados en los bancos del Norte y del Sur.
Investigaciones que requieren la total cooperaci�n internacional,
permitiendo adem�s no dejar impunes a los corruptos; esta ser�a la
�nica manera de poder ver un d�a a la democracia y a la transparencia
venciendo a la corrupci�n (sin olvidar que un acto de corrupci�n
implica a un corrupto pero tambi�n a un corruptor)

Establecer un impuesto a las transacciones financieras. Esta propuesta
inicial del Premio Nobel de Econom�a (de 1972) James Tobin,
posteriormente desarrollada por otros economistas, luego por la red
internacional ATTAC ( Asociaci�n por una Tasaci�n de las Transacciones
financieras para la Ayuda a los Ciudadanos), podr�a aportar
importantes sumas al desarrollo. Seg�n evaluaciones realizadas por el
CNUCED ( Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el
Desarrollo) 1000 mil millones de d�lares por d�a producir�an, con
impuesto del 1% 720 mil millones por a�o.

Como hip�tesis de trabajo propone adem�s cortar la manzana en dos: 360
mil millones para un fondo social y ecol�gico para los pa�ses en que
se originen las transacciones y los restantes 360 mil millones a
distribuir entre los pa�ses del Sur (para educaci�n, salud, etc) Ambos
fondos deber�an ser gerenciados por Consejos de Administraci�n mixtos
es decir integrados por representantes de la sociedad civil y de los
gobiernos.

La plataforma internacional de ATTAC planteaba un impuesto del 0,1%
que producir�a unos 100 mil millones anuales destinados a luchar
contra las desigualdades en materia de educaci�n, salud, seguridad
alimentaria y desarrollo sostenido. Resulta evidentemente imposible
poder determinar con exactitud los montos que podr�a generar dicho
impuesto dado que ellos dependen del porcentaje que se establezca y
del tama�o de los flujos financieros. Pero parece necesario, en vistas
de la globalizaci�n operada en los mercados desde la propuesta inicial
de Tobin (y especialmente por los productos derivados que generan los
pases entre mercados) establecer un impuesto a todas las transacciones
financieras (acciones, obligaciones, divisas y derivados) de modo que
los operadores se "acostumbren" a aceptar esta tasa solidaria, sin
evitarla buscando otros subterfugios.

Llevar la Ayuda P�blica al Desarrollo al menos al 0,7% del PBI:
resulta intolerable que despu�s que los gobiernos de los pa�ses ricos
se comprometieron a aumentar sus APD, en realidad estas fueron
diluy�ndose como nieve al sol. Con un promedio actual del 0,24%, las
APD deber�an multiplicarse por tres para cumplir con los compromisos
asumidos. Sabiendo que las APD oscilan en los 50 mil millones de
d�lares, multiplic�ndolos por tres se llegar�a a los 150 mil millones
por a�o que deber�an ser �ntegramente donados (como reparaci�n o como
sucede a menudo bajo la forma de cr�ditos a la exportaci�n o de
cr�ditos concesionales).

Establecer un impuesto excepcional a las grandes fortunas: en su
informe de 1995 la UNCTAD propone establecer un impuesto mundial �nico
que permitir�a movilizar fondos bastante considerables.

Una nueva l�gica de desarrollo

A la actual l�gica de desarrollo que se basa en la adopci�n por los
pa�ses del Sur, de programas de ajuste neoliberal, bajo la presi�n de
los acreedores, es preciso sustituirla por una l�gica de desarrollo
end�geno e integrado.

Esta mutaci�n requiere dos fases:

Poner fin a los planes de ajuste estructural: estos planes provocan el
debilitamiento del Estado y lo vuelven dependiente de las
fluctuaciones externas (baja de precios, ataques especulativos, etc),
frenan todo desarrollo sociocultural (educaci�n, desempleo, acceso a
los medicamentos, etc) y condenan a los ciudadanos de la periferia a
ver bajar sus remuneraciones mientras suben los precios (IVA,
devaluaciones, desindexaciones,etc.) y deber�an en consecuencia ser
totalmente suprimidos.

Adoptar un modelo de desarrollo parcialmente autocentrado: estos
modelos requieren la construcci�n de fundamentos econ�micos interiores
lo suficientemente s�lidos como para poder abrirse inmediatamente a
los intercambios comerciales internacionales. Este tipo de desarrollo
implica la creaci�n de zonas pol�tica y econ�micamente integradas, el
surgimiento de modelos de desarrollo end�genos, el fortalecimiento de
los mercados internos, la creaci�n de ahorro local para el
financiamiento local, el desarrollo educativo y sanitario, la puesta
en marcha de impuestos progresivos y de mecanismos de redistribuci�n
de la riqueza, diversificaci�n de las exportaciones, reforma agraria
que garantice el acceso de todos los campesinos a la tierra, etc.

La actual arquitectura mundial que impone a la periferia la funci�n de
aportar las materias primas y mano de obra barata a un centro que
dispone de capitales y de tecnolog�a, debe ser reemplazada por
agrupaciones econ�micas regionales. Solo este tipo de desarrollo
autocentrado permitir�a el surgimiento de relaciones Sur-Sur,
condici�n sine qua non para el desarrollo econ�mico del Tercer Mundo
(y por extensi�n del mundo). Estas regiones integradas podr�an dotarse
de poderes econ�micos regionales con poder de regulaci�n econ�mica y
social.

Modificar las reglas del comercio mundial que en la actualidad
consisten en el proteccionismo de los pa�ses del Norte hacia los
pa�ses del Sur y una apertura total de los mercados del Sur hacia los
pa�ses del Norte. Esta l�gica no solo debe ser revertida, amplio
acceso de los productos del Sur a los mercados del Norte, combinada
con un cierta de proteccionismo del Sur (especialmente para
permitirles adquirir soberan�a alimentaria) y con reglas comerciales
mundiales subordinadas a criterios ambientales , sociales y culturales
estrictos. La salud, la educaci�n, el agua o la cultura deben ser
eliminados del campo comercial internacional.

Restablecer mecanismos de control de los capitales

Controlar los movimientos de capitales, de modo que la afluencia de
capitales no desemboque permanentemente en reflujos devastadores. Una
medida adecuada podr�a ser el establecimiento de un dep�sito
temporario y obligatorio, a toda entrada de capital, por el t�rmino de
un a�o y por un importe equivalente al 30% de la suma invertida. Al
t�rmino del a�o este dep�sito le ser�a reintegrado al inversor
(alentado as� a invertir a largo plazo). Este dep�sito no recibir�a
ninguna remuneraci�n. Existen muchas otras medidas de control, por
ejemplo el mantener las obligaciones y las acciones por lo menos
durante un a�o antes de revenderlas, restringir la convertibilidad de
la moneda solo a las operaciones comerciales (excluyendo en
consecuencia los activos financieros), imponer un impuesto alto en los
casos de excesivas fluctuaciones (como lo propone el economista Bernd
Spahn),etc.

 Volver a reglamentar los mercados financieros: la desregulaci�n de
los mercados financieros provoc� un desmesurado desarrollo de la
especulaci�n financiera. La actual y absoluta ausencia de controles y
de normas especialmente en operaciones sobre productos financieros
complejos, inventados cada d�a permite especular durante determinados
plazos.

Tal el caso de los productos cotizables en los que dos inversores
pueden especular, por ejemplo, sobre la correlaci�n entre la
cotizaci�n del trigo y la del petr�leo durante el curso de un mes (se
dir� que el trigo y el petr�leo son activos subyacentes de los cuales
deriva la operaci�n).

Si la correlaci�n entre los dos se mantiene dentro de ciertos m�rgenes
(una cotizaci�n) predefinidos por ambas partes uno de los
especuladores gana ; si por el contrario la cotizaci�n supera dichos
m�rgenes es el otro el que gana. Es evidente que ninguno de ellos se
preocupa ni por el trigo ni por el petr�leo sino en su car�cter de
variables sobre las que especular durante un mes (estas variables
pueden ser reemplazadas por cualquier otro tipo de activos: acciones,
divisas, indices burs�tiles, etc) Y la econom�a real ve fluctuar estas
cotizaciones en funci�n de operaciones cuyo �nico objetivo es hacer
dinero con el dinero mismo.

 Es tiempo de reglamentar los mercados financieros comenzando por
asegurar la "trazabilidad" de todas las operaciones financieras
(determinar claramente qu� hace qui�n y en qu� sentido) y
reglamentarlas en consecuencia.

Suprimir los para�sos fiscales que tiene por objeto inflar el globo
financiero y fragilizar las econom�as l�citas (se blanquean anualmente
entre 500 y 1500 billones de d�lares).

Medidas anexas

Reducir dr�sticamente la producci�n de armas: mientras se pregona
austeridad hacia los cuatro puntos cardinales, la reducci�n de los
presupuestos militares permanece tab�. Es necesario sin embargo romper
con esta l�gica. La mayor responsabilidad cabe a los ricos pa�ses del
Norte dado que tres pa�ses concentran el 80% de la venta de armas en
el mundo: EEUU, 50%, Francia 15% y el Reino Unido 15%.

La mancipaci�n de la mujer: como lo destaca la Marcha Mundial de las
Mujeres "la situaci�n en que se hallan las mujeres solo se explica por
la fuerza conjunta de dos fen�menos mundiales: el capitalismo
neoliberal y el patriarcado que se retroalimentan y se refuerzan
mutuamente para mantener a la gran mayor�a de las mujeres en
inferioridad cultural, desvalorizaci�n social, marginaci�n econ�mica
"invisibilizaci�n" de su existencia y de su trabajo,
 "mercantilizaci�n" de su cuerpo, situaciones todas que se asemejan a
un verdadero apartheid. La Marcha propone construir un mundo de
igualdad entre hombres y mujeres, un mundo donde las mujeres est�n
liberadas de toda forma de violencia y de explotaci�n, incluyendo la
violencia dom�stica, las violaciones, la prostituci�n, el tr�fico de
mujeres, el acoso sexual, la violencia social y la violencia estatal.
La Marcha proponer encarar las causas estructurales de la pobreza de y
la violencia hacia las mujeres y propone precisas reivindicaciones.

Muchas otras medidas deben ser tomadas tanto en el Norte como en el
Sur, pero ser�a demasiado extenso mencionarlas a todas. Por lo tanto
aqu� van algunas: el derecho universal al trabajo mediante una
reducci�n radical del horario laboral opuesto a la l�gica actual en
que coexisten desocupados y trabajadores sobrecargados y agobiados por
el stress; la libre circulaci�n y la libre residencia de las personas;
la ruptura en el Norte con el mecanismo de la deuda p�blica que genera
pol�ticas de austeridad y de transferencia masiva de ingresos de los
ciudadanos hacia los due�os del capital, el ingreso universal
ciudadano, el establecimiento de cl�usulas sociales, etc.

Como lo se�ala Ricardo Petrella " la urgencia pol�tica solo puede ser
satisfecha sino mediante la promoci�n del bien com�n. Esto significa
en primer t�rmino la salvaguardia o el restablecimiento de condiciones
vitales de existencia a millares de seres humanos (aire, agua dulce,
oc�anos, energia solar) que deben adquirir el status de bienes
patrimoniales de la humanidad- Una segunda serie de canteras pol�ticas
planetarias incluye: la seguridad com�n (alimentaria, ambiental,
financiera, sanitaria), la paz, la diversidad cultural, la represi�n
de los cr�menes contra la humanidad. En este sentido, la urgencia
pol�tica reside en la definici�n y la puesta en marcha de un nuevo
sistema financiero y monetario mundial y de nuevas normas para el
comercio internacional, en rechazo de las normas del Fondo Monetario
Internacional (FMI) y de la OMC (Le Monde Diplomatique, agosto de
1999).

Toussaint, Eric y Zacharie, Arnaud

El ebrio nav�o de la mundializaci�n. Escalas en el seno de la aldea
planetaria. CADTM - Bruselas/ SYLLPSE - Paris,2000,264pp.isbn
2-9600254-0-7 cadtm@skynet.be


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5. Iberoam�rica
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 Paraguay

M�s de 2 millones de ni�os trabajan en las calles paraguayas.

Informes de: Myriam Insfr�n, FM Trinidad Paola Rodr�guez, -Pulsar-

Asunci�n: Alrededor de 2 millones 200 mil ni�os y ni�as paraguayos de
hasta14 a�os de edad, son parte de la poblaci�n laboral del pa�s. Esto
seg�n Un informe de la Secretar�a de Acci�n Social de la Presidencia
de la Rep�blica y Consultores del Fondo de las Naciones Unidas para la
Infancia, UNICEF.

 La cifra representa el 41 por ciento de la poblaci�n total del pa�s.
El informe indica adem�s, que un 11 por ciento de los ni�os est�n con
desnutrici�n cr�nica, y que 42 de cada 100 viven en condiciones de
pobreza.

 El estudio respecto a la infancia se�ala que 16 de cada 100 ni�os no
consumen sal yodada, lo que pone en riesgo su salud. Con relaci�n a la
educaci�n, tambi�n se registraron problemas, pues el 14,3 por ciento
no asiste o nunca asisti� a institutos de ense�anza. Estos fr�os datos
desnudan el deterioro de las condiciones de vida, la explotaci�n, y
marginaci�n en que vive casi la mitad de ni�os paraguayos

Ind�genas mendigan en las calles. de Paraguay

Asunci�n: El n�mero de ind�genas mendigando en las calles va en
aumento en Paraguay. Hombres, mujeres y ni�os de la etnia mbya se
ubican en las calles de la capital, Asunci�n, y piden caridad. Muchos
deben dormir en las calles, por lo que los ni�os presentan
enfermedades infecciosas y respiratorias.

Algunos han confesado que inhalan pegamento de zapatero "para no tener
hambre y poder soportar". La problem�tica de los pueblos indios se
agrava, pues han proliferado las invasiones a sus territorios por
parte de campesinos sin tierra y empresas madereras.

Los mbya representan 2 mil 500 familias, lo que equivale a unas 9 mil
personas. Esta comunidad est� ubicada desde el r�o Apa al norte hasta
el Paran� al sur del pa�s. Est�n en los departamentos de Concepci�n,
San Pedro, Caaguaz�, Caazap�, Itap�a, parcialmente Alto Paran�,
Canindedy�, Guair� y Misiones. Seg�n datos oficiales, en Paraguay
sobreviven unos 150 mil ind�genas que viven en comunidad, sobre un
total de 5 millones 200 mil habitantes. Los nativos restantes se han
incorporado totalmente a la poblaci�n blanca y mestiza.

 Uruguay

El Presidente de Uruguay, Dr Jorge Batlle Ib��ez adelant� los temas
que ser�n el centro de las tareas de la Rep�blica para el a�o pr�ximo.

Reformas estructurales que calific� de necesarias, impostergables y
urgentes; m�s liberalizaci�n de la econom�a y apertura al mundo ser�n
los temas centralizadores de la acci�n de gobierno desde el pr�ximo 1�
de marzo, cuando su administraci�n cumpla un a�o de gesti�n
gubernativa.

Desde el 1� de marzo pasado, la administraci�n del presidente Batlle
dispuso varias acciones de liberalizaci�n y de apertura progresiva,
que hasta el momento no muestran resultados convincentes. La
reactivaci�n de la econom�a no aparece y varios sectores asisten
imp�vidos a una recesi�n que ya se insinuaba a fines de 1998 y que
algunos califican de similares proporciones a la desatada en el a�o de
1982 cuando se rompi� "la tablita", el r�gimen cambiario de la
dictadura militar.

 Mientras tanto, el Presidente cuestion� el criterio de 141.316
orientales que presentaron con su firma un recurso de Refer�ndum
contra 13 de los 89 art�culos de la Ley 17.243, conocida como "Ley de
urgencia", aprobada el pasado 29 de junio por el Parlamento. Esa norma
faculta al Poder Ejecutivo a privatizar varias �reas que hoy est�n en
manos del Estado, con el objeto de abandonarlas y procurando obtener
recursos por la v�a de la tercerizaci�n. Batlle dijo que todav�a hay
sectores de la sociedad uruguaya que ofrecen resistencia a los cambios
y que pretenden vivir en un mundo que ya no existe. Luego de aceptadas
las firmas por la Corte Electoral, el gobierno debi� suspender un
llamado a subasta p�blica de las acciones de una futura Sociedad
An�nima que operar� la Terminal de Contenedores del Puerto de
Montevideo.

En �stos momentos la Corte Electoral est� estudiando la validez de las
firmas. Si �stas llegan a 48.000 un 2% del padr�n electoral, deber�
convocar a toda la ciudadan�a para adherir al recurso en una jornada
que se realizar�a en febrero o marzo pr�ximos. All� ser�n necesarias
unas 600.000 voluntades. Si el recurso obtiene �ste apoyo, entonces
habr� refer�ndum con voto obligatorio en un plazo de seis meses m�s.

Si bien el Presidente Batlle consider� leg�tima y respetable la
posici�n de estos ciudadanos, asegur� que el pa�s debe enfrentar desde
el a�o pr�ximo una serie de reformas estructurales, liberalizaci�n y
apertura de la econom�a que no admiten demora, porque el pa�s reclama
inversiones para generar fuentes de trabajo. Batlle asegur� que en esa
l�nea preparar� un mensaje al pa�s que ser� p�blico cerca del pr�ximo
1� de marzo.

 A todo esto, el trimestre julio-setiembre exhibi� una nueva ca�da del
PBI que alcanz� al 1,8% con relaci�n al mismo per�odo de 1999. Estos
datos oficiales del Instituto Nacional de Estad�stica prenuncian que
est� cada vez m�s lejana la posibilidad de alcanzar la previsi�n del
equipo econ�mico de que el producto var�e entre -0,5 y 0,5% en el a�o
que finaliza. Los niveles requeridos de crecimiento para alcanzar la
meta del gobierno no parecen posibles si consideramos que la econom�a
viene de siete trimestres consecutivos de recesi�n. Y los datos
parciales disponibles del �ltimo trimestre no mejoran la situaci�n.
Las solicitudes de exportaci�n cayeron 22,4% en noviembre, las
importaciones en admisi�n temporaria se contrajeron en 4,6% y en
octubre el poder de compra de los asalariados cay� 0,48% en t�rminos
reales.

Un comunicado del Banco Central de Uruguay se�al� que en el tercer
trimestre continu� la tendencia recesiva, aunque el resultado global
muestra una menor ca�da.

El desempleo contin�a en 13,9% de la PEA, lo que significa que unos
200.000 orientales se encuentran desocupados.

 La Navidad que se acerca nos recuerda que ya se termina un a�o 2000
que sin dudas ser� recordado en �ste pa�s por su singular dureza.
Pero, la perspectiva del a�o que vendr� no nos deja muchos motivos
para la celebraci�n.

 Gustavo V. Ant�nez.

Argentina

El grupo Attac-Mendoza realiza una denuncia sobre un nuevo avance de
la petrolera Repsol y la complicidad del Gobierno provincial en un
�rea ecol�gicamente valiosa y �nica en su g�nero, solicitando el apoyo
de los lectores.

La Laguna de Llancanelo se encuentra en el sur de la Provincia de
Mendoza. Es un humedal catalogado de importancia internacional por las
Naciones Unidas donde habitan m�s de 150 especies de aves, incluyendo
enormes colonias de flamencos, patos y cisnes. Es una importante
parada de aves migratorias, y territorio de nacimiento, cr�a y
reproducci�n.

Llancanelo es �nico dentro de una amplia zona �rida.

Hoy, mezquinos intereses econ�micos ponen en peligro el patrimonio de
toda la humanidad. La compa��a petrolera YPF-REPSOL anunci� que
pretende reanudar la exploraci�n y explotaci�n en la reserva
Llancanelo. Tanto la empresa petrolera como el gobierno intentan
convencer a la poblaci�n de que no se producir� da�o ecol�gico alguno,
lo que por supuesto es absolutamente falso.

ATTAC Mendoza le pide que le haga llegar su repudio al Ministro de
Ambiente y Obras P�blicas, Aldo Ostropolsky. Simplemente copie el
mensaje, f�rmelo y env�elo a la siguiente direcci�n:
aostropolsky@mendoza.gov.ar

(Asunto: No a la entrega de Llancanelo)
(Por carta o telegrama: Ministerio de Ambiente y O.P.; Peltier s/n
(5500), Mendoza)

Esta forma de participaci�n busca hacer o�r la opini�n de la mayor�a y
no s�lo la del gerente comercial de alguna compa��a multinacional.
Porque creemos que democracia no es solamente votar cada tanto sino
tambi�n tomar parte en las decisiones que a la larga nos conciernen.
Otro mundo es posible. Y necesario.

Por favor, difunda este mensaje y el pedido en la medida de sus
posibilidades.


Sr. Ministro;

Como Ud. bien sabe, la Laguna de Llancanelo es una reserva natural
provincial y forma parte de los sitios protegidos por la Convenci�n de
Sitios Ramsar de la Organizaci�n de las Naciones Unidas.

En estos d�as se debate en una Comisi�n Bicameral de la Legislatura
Provincial sobre la posibilidad de autorizar a la empresa YPF-REPSOL a
reanudar la exploraci�n y explotaci�n de las reservas de petr�leo que
se encuentran en el subsuelo de esta reserva.

La �nica forma de preservar a la reserva de todo impacto es impedir
terminantemente la continuaci�n de las actividades petroleras en su
per�metro. Es por eso que los abajo firmantes solicitamos que se
revierta inmediatamente este proceso y se donen las garant�as
necesarias para que nunca vuelva siquiera a proponerse una violaci�n
semejante de convenciones internacionales (por no mencionar los
decretos provinciales)

Firma:
Nombre y apellido:
Profesi�n:
Domicilio:
D.N.I.
Tel�fono:
Correo electr�nico:

Asamblea Nacional de Attac-Argentina

El viernes 7 del corriente con la asistencia de un nutrido n�mero de
adherentes de la Capital y representaciones de Attac-C�rdoba, Attac-La
Plata, Attac-Mendoza, Attac- Rosario y de la hermana rep�blica del
Uruguay, se realiz� la Primera Asamblea Anual de Attac-Argentina.

Durante su transcurso se pas� revista a la tarea realizada durante el
a�o transcurrido desde su creaci�n, se realizaron m�ltiples propuestas
de trabajo para el nuevo a�o y se comprometi� en lo inmediato el apoyo
y la concurrencia al Foro Social de Porto Alegre en enero pr�ximo y la
organizaci�n de actos y movilizaciones con motivo de la reuni�n que
celebrar�n los Ministros de Relaciones Exteriores de toda Am�rica en
abril pr�ximo en Buenos Aires para tratar el establecimiento del ALCA
(Area de Libre Comercio de las Am�ricas) impulsado por los EEUU.

attac@rcc.com.ar
www.attac.org/argentina



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