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[Ángel <angel@porticoluna.org>]

Hola amig@s.
Aquí os envío material sobre el "monotema" de la semana (y lo que nos
queda...) extraído de la prensa independiente (para comparar...).

Ángel
;)
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Rumsfeld insinúa que atacarán a más de un estado
Colin Powell no descarta volver a permitir a la CIA que mate a líderes
extranjeros 
Los gobernantes estadounidenses hablan ya de atacar a «los países que
protegen a las organizaciones terroristas», en plural, aunque todavía no
precisan en qué va a consistir la anunciada represalia. Entretanto,
delegados paquistaníes viajarán hoy a Kabul para pedir a los talibán que
entreguen a Osama Bin Laden.
GARA | WASHINGTON
El secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, aseguró ayer a la
cadena de televisión Fox que «la única opción de Estados Unidos es
defenderse contra los ataques terroristas y atacar a los países que protegen
a las organizaciones terroristas».
Según Rumsfeld, político que los observadores consideran más derechista que
el propio Bush y muy cercano a la gran industria armamentística de la
primera potencia mundial, «la única opción es pedir a los estados que dan
cobijo a las organizaciones terroristas que dejen de hacerlo y, si no lo
hacen, poner nosotros el punto final». Reconoció ayer que «los terroristas
pueden atacar en Estados Unidos en cualquier momento, en cualquier lugar y
con diferentes tipos de armas. Por eso, tenemos que atacar el núcleo de esos
grupos terroristas para acabar con ellos». Rumsfeld afirmó que EEUU está
obligado a llevar la guerra contra los agresores, que durará «años», allí
donde están. «La mejor defensa es un buen ataque», indicó.
Aunque Rumsfeld no precisó más su mensaje, el vicepresidente Cheney dijo que
no hay pruebas de una posible implicación de Irak en los ataques del martes
y el secretario de Estado Powell valoró positivamente «las reacciones de
Irán y Siria» tras los trágicos sucesos, lo que «podría abrir una vía a la
cooperación».
Además, Colin Powell dijo en la CNN que EEUU se halla «ante un tipo de
guerra bien diferente» y comparó la actual situación con la que se daba
antes de la Guerra del Golfo. En Irak, señaló, «era fácil ver el enemigo y
determinar qué había que hacer. Ahora el enemigo está escondido y oculto en
células repartidas por todo el mundo. Será difícil encontrarle y acabar con
él, pero lo haremos». Le preguntaron entonces si el Gobierno pedirá eliminar
la directiva firmada por el presidente Ford en 1976 que impide a la CIA
participar en operaciones para matar a líderes extranjeros. «Todo está bajo
revisión», respondió Powell.
Aparentemente sin prisas, Bush revisaba ayer las diferentes alternativas con
sus asesores, aunque no se esperaba ninguna acción militar a corto plazo.
Estados Unidos, por otra parte, está satisfecho de la disposición de
Pakistán de pedir al Gobierno afgano que entregue a Bin Laden. El presidente
paquistaní reclamó a cambio la ayuda económica de EEUU y que, entre otras
cosas, India no intervenga en el conflicto.
«Es claramente un paso en la buena dirección», dijo un portavoz de la Casa
Blanca tras conocerse que una delegación paquistaní viajará hoy a Kabul para
pedir que el Gobierno afgano entregue a Bin Laden o que se prepare para una
masiva acción militar de represalia. Bush habló el sábado por teléfono con
el presidente paquistaní, Pervez Musharraf, para solicitar su cooperación.
De hecho, los primeros soldados estadounidenses llegaron ayer a Pakistán,
según informaron diversos medios. Unos 50 soldados de un comando aterrizaron
de madrugada en el aeropuerto de Peshawar, cercano a la frontera con
Afganistán, y se dirigieron al cuartel del Servicio Especial del Ejercito
paquistaní.
Aunque EEUU tiene ampliamente demostrada su capacidad militar para lanzar en
cualquier momento un amplio ataque de represalia, expertos militares
coinciden en que la campaña se preparará con detenimiento.
Las encuestas indican un respaldo mayoritario de la opinión pública de EEUU
a una acción militar. El senador demócrata John Kerry advirtió, no obstante,
de que EEUU debe llevar la campaña militar con mucho tacto. Recordó que, al
principio, también la guerra de Vietnam contaba con un gran respaldo. «En un
momento como éste no conviene inflar en exceso las pasiones. Hay que llegar
hasta el corazón de las redes terroristas, pero al mismo tiempo hay que
establecer alianzas y ser sensibles hacia los países islámicos».

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Por la defensa del derecho internacional
Beinusz SZMUKLER PRESIDENTE DE LA ASOCIACION AMERICANA DE JURISTAS
La Asociación Americana de Juristas condena en forma categórica los
atentados terroristas perpetrados en territorio de los Estados Unidos de
América y expresa su solidaridad con las víctimas y sus familias. Nada puede
justificar tales actos de barbarie dirigidos contra la población civil.
Sobre su autoría, por ahora, todas las hipótesis son concebibles, desde
grupos islámicos fundamentalistas hasta grupos nazis estadounidenses, como
los autores del atentado de Oklahoma, que proclaman la supremacía blanca y
se han declarado públicamente en guerra contra el Estado federal. Empero es
inadmisible la utilización de esta tragedia por parte del Gobierno, que
presenta los hechos no como atentados terroristas, sino como el inicio de
una guerra no convencional con un enemigo difuso que actúa en las sombras y
al que habría que enfrentar con los mismos métodos propios de la «guerra
sucia» y atacar a los países que les darían refugio o protección. Es un
lenguaje muy conocido para los pueblos latinoamericanos víctimas del
terrorismo de Estado, fundado en la «doctrina de la seguridad nacional», que
no olvidan que en la «Escuela de las Américas» de EEUU fueron entrenados los
responsables de las violaciones masivas y sistemáticas de los derechos
humanos que afectaron el continente.
El Gobierno estadounidense se propone actuar, como por otra parte lo viene
haciendo asiduamente, al margen y contra el derecho internacional y
arrastrar a esa política a otros estados.
Por ello, la Asociación de Juristas:
1) reitera su enérgico repudio a los atentados terroristas perpetrados en
territorio de EEUU y su solidaridad con las víctimas y sus familias;
2) ratifica su posición de defensa del derecho internacional, que prohíbe la
amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones entre los estados y otorga
al Consejo de Seguridad de la ONU la exclusividad en la determinación de «la
existencia de toda amenaza a la paz, su quebrantamiento o acto de agresión»
(art. 39 de la Carta de la ONU).
3) exhorta al Gobierno a actuar reflexivamente conforme a derecho,
utilizando la vía de la justicia y la cooperación internacional en una
solución global al problema del terrorismo, y a prescindir de la utilización
de medidas de represión arbitrarias o abusivas, sea de modo unilateral o
promoviendo acciones colectivas con sus aliados. Al mismo tiempo, llama a
todos los gobiernos a no favorecer ningún apartamiento de la ley
internacional por parte de Estados Unidos.
4) señala que la opción militar causará un enorme costo social que agravará
aún más las penosas condiciones actuales de existencia de los pueblos,
víctimas, siempre, del terrorismo y la injusticia.

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«Si nos atacan, la única alternativa será la yihad»
GARA | ISLAMABAD
El líder supremo de los talibán afganos, el mulá Mohamed Omar, convocó a los
doctores de la fe musulmana para discutir la emisión de un edicto apelando a
la guerra santa contra EEUU si ataca el país en respuesta a los atentados
contra Washington y Nueva York. «Los principales ulemas deben acudir a Kabul
para tomar una decisión sobre un posible ataque de Estados Unidos contra la
sagrada tierra islámica de Afganistán», indica un comunicado del líder
supremo de los talibán. «Y entonces la orgullosa nación de Afganistán
defenderá al país islámico a la luz de su edicto de la ley islámica
(sharia)», añade el comunicado publicado ayer en el diario "Shariat",
considerado portavoz del régimen talibán.
Omar ya ha convocado a la población afgana a prepararse para la guerra santa
si EEUU ataca Afganistán. «Está muy claro. Si nos atacan, la única
alternativa para nosotros será la yihad (guerra santa)», subrayó el ministro
de Cultura e Información de los talibán, Qudratullah Jamal. El Gobierno
afgano descartó que vaya a entregar a Bin Laden, negó que el saudí estuviera
detrás de los atentados en EEUU y dijo que este país no les ha dado pruebas
irrefutables de que sea un «terrorista».
* Osama bin Laden volvió ayer a desmentir su implicación en los ataques
contra Nueva York y Washington, según afirma en un comunicado recibido por
Afghan Islamic Press (AIP), una agencia próxima a los talibán con sede en
Pakistán. «Estados Unidos me apunta del dedo, pero anuncio categóricamente
que yo no lo hice» declaró Bin Laden en un comunicado transmitido a AIP.
«Los que perpetraron los ataques lo hicieron por sus intereses personales»
declaró Bin Laden en este comunicado, que, según AIP, le fue transmitido por
Abdul Samad, un adjunto del millonario de origen saudí.
Bin Laden reafirma, como ya argumentaron los talibán, que no tiene los
medios para organizar atentados a causa de las restricciones impuestas a sus
contactos con el mundo exterior por el mulá Mohamed Omar. «Vivo en
Afganistán. Soy un adepto del Guía de los Creyentes (el mulá Omar), que no
permite participar en estas actividades», añade este texto redactado en
árabe, la lengua natal de Osama bin Laden.
Pese a las declaraciones de Bin Laden, Washington le acusa y los medios de
comunicación especulan sobre su actual paradero. Algunas fuentes afganas
apuntan a que podría haberse escondido en uno de sus refugios en la zona de
la ciudad sureña de Kandahar, debido a que éste sería uno de los lugares más
protegidos, pues en él tiene su base el mulá Mohamed Omar. Pero, según
fuentes en Kandahar, Bin Laden, acompañado de sus seguidores y extensa
familia, huyó a un lugar remoto de las zonas rurales de Afganistán. Es más,
el diario paquistaní "The News", que cita fuentes en Kandahar, asegura que
ni un sólo ciudadano árabe de los que supuestamente forman el grueso de los
seguidores de Bin Laden era visible en la ciudad.
* Miles de personas rindieron ayer un último homenaje al comandante Ahmed
Shah Masud, héroe de la resistencia afgana a la invasión soviética, en el
valle del Panshir, región de la que procedía el líder de la oposición
antitalibán. Masud fue víctima de un atentado llevado a cabo el 9 de
setiembre, dos días antes del atentado contra Estados Unidos. Muchos
habitantes del distrito de Bozarak, emocionados, asistieron a los funerales
del León del Panshir. Su féretro, cubierto por la bandera verde, blanca y
negra del Gobierno derrocado, del que fue ministro de Defensa, llegó en un
helicóptero desde la provincia de Takjar, donde falleció el sábado. Cientos
de hombres intentaban acercarse hasta el féretro para arrojarle flores al
tiempo que gritaban Allah u Akbar (Dios es grande). Según el Ministerio de
Exteriores de Tayikistán, dos marroquíes residentes en Bélgica, Kassim
Bocouli y Karim Souzani, se hicieron pasar por periodistas y, cuando
estuvieron ante Masud, hicieron estallar los explosivos que llevaban
escondidos en la cámara.
* Irán, que el sábado cerró su frontera con Afganistán, no aceptará «sufrir
daño alguno» y está decidido a «defender su territorio pase lo que pase» en
caso de represalias de EEUU contra Afganistán, según anunció ayer un
dirigente iraní.   





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