Grano de Arena on Wed, 7 Aug 2002 15:46:02 +0200 (CEST) |
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[nettime-lat] [ATTAC] INFORMATIVO 151 - NORTE-SUR ¿QUIÉN DEBE A QUIÉN? |
EL GRANO DE ARENA Correo de información ATTAC n°151 Miercoles, 07/08/2002 ______________________________ Suscriptores: 9 540 Gracias por hacer circular y difundir esta información. Para suscribirse o desuscribirse http://attac.org/indexes/ Este correo informativo ha sido elaborado por el equipo de colaboradores espontáneos de "El Grano de Arena". [email protected] RTF : http://attac.org/attacinfoes/attacinfo151.zip PDF : http://attac.org/attacinfoes/attacinfo151.pdf ____________________________________________________________ En este número 1.La enfermedad moral del capitalismo: La economía del engaño se transmite con la velocidad de la luz. Todos los días cae algún gigante. Y no hemos llegado al final. 2. Carta de los Provinciales de la Compañía de Jesús a los Ministros de Economía del G7 sobre la anulación de la Deuda Externa: La carta presta atención especial a los aspectos éticos del tema de la anulación de la deuda. Setenta Provinciales de la Compañía de Jesús y el Secretariado del Apostolado Social de los jesuitas, en Roma, apoyan esta iniciativa. 3. Privatizar las jubilaciones: el trabajo de los empleados como garantía de la especulación financiera: En otras palabras, estamos frente a otro ejemplo de aquélla v vieja costumbre de los patrones de socializar las pérdidas y de privatizar las ganancias. 4. El accionar del FMI en la Argentina: La Argentina ha pasado de ser la alumna ejemplar, el ejemplo de la aplicación incondicional de las directrices del FMI, a constituirse en la "peor de todas". 5. México: El escándalo silencioso de la deuda externa y del modelo neoliberal: Mientras el pueblo se empobrece obligado a sacrificarse para pagar la deuda externa, los capitalistas mexicanos se enriquecen de manera inédita. 6. La privatización: ¿una medida Made in Perú? No se puede tomar la decisión de privatizar las empresas eléctricas y del agua, sin la opinión favorable de la población involucrada, más aun cuando el gobierno que ha sido elegido, descartó la privatización como una fuente de ingresos para cubrir el déficit fiscal. 7. Derechos económicos, sociales y culturales: Foro Social Nacional: otra Venezuela es posible: La primera semana de julio se realizó en Caracas, el 2° Foro Social Nacional bajo el lema tomado prestado del Porto Alegre: "Otro mundo es posible". ______________________________ 1. La enfermedad moral del capitalismo ____________________________________________________________ Joaquín Estefanía Primera parte (dada su extensión este artículo será publicado en dos números consecutivos). 1 Un fantasma recorre el mundo. El de la enfermedad moral del capitalismo, que arrasa su legitimidad. El sistema se halla afectado por una serie de escándalos, crisis recurrentes y financiarización que minan su presente y su futuro. El problema es tanto mayor por cuanto el capitalismo carece de alternativas. Muchas de las instituciones fundamentales para su funcionamiento no dan la talla. Una de las burbujas especulativas más importantes de la historia ha estallado y caído el telón sobre el suelo del escenario. Los ciudadanos han visto desnudas la codicia, la avaricia, la desigualdad, la exclusión, sin velos de ningún tipo. Las bolsas de valores, los mercados donde cada vez más ciudadanos depositaban sus ahorros, están deprimidos y llenos de tristeza. Millones de personas están perdiendo su dinero o sencillamente se han arruinado. Pero lo más dramático está por llegar: el momento en que el contagio se traslade de los pequeños accionistas a la solvencia de los bancos. Sólo entonces se encenderán las luces rojas y los Estados intervendrán, olvidándose de los principios de la economía de mercado. La burbuja bursátil ha magnificado los cambios en las costumbres empresariales y ha llevado las tendencias que se habían ido forjando durante más de una década -coincidiendo con la caída del muro de Berlín- al paroxismo. Hubo un tiempo en el que se creyó que en las bolsas sólo se podía ganar dinero, y en el que se olvidó la ley de Newton de que todo lo que sube, baja (y no al revés). La historia dice que el furor que acompaña a una burbuja especulativa, en este caso la de la nueva economía, provoca la desaparición repentina de la desconfianza en casi todos los sectores. Cuando la burbuja se pincha, se pierde la confianza. La de ahora es, sobre todo, una crisis de confianza. No puede decirse que no hubiera señales de que este crash bursátil podía llegar. Desde principios de los años noventa, casi en paralelo a la unipolaridad del mundo motivada por el fin del socialismo real, el sistema se ve afectado, con una cadencia regular, por una serie de crisis de distinto aspecto, pero con una característica común: comienzan por lo financiero y se contagian al resto del sistema productivo. Sucede cuando la globalización se ha constituido en el marco de referencia de nuestra época. Primero fue en Europa; en 1992, el debilitamiento de las monedas se llevó por delante el Sistema Monetario Europeo. En 1994 fue México, donde la salida de capitales terminó con el paradigma del país emergente que ha abierto sus fronteras y camina de modo lineal hacia la modernidad. En el verano de 1997 quedó triturado otro mito: el de los tigres y los dragones, el modelo asiático tan ensalzado y tan falsificado hasta entonces por los neoliberales. Poco después saltó Rusia, que suspendió el pago de su deuda, demostrando que no puede haber democracia sin Estado. Desde 1998 y 1999, la volatilidad se instala injustamente en América Latina, una región que había hecho con nota los deberes que los ortodoxos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial le habían impuesto; un año después, Argentina vuelve a caer en la postración y repudia su gigantesca deuda externa de más de 150.000 millones de dólares. En diciembre de 2001, la crisis llega al corazón del sistema, y Enron, una empresa de energía hasta ese momento adulada por todos, entra en bancarrota. Ha comenzado la ronda de la contabilidad creativa. La economía del engaño se transmite con la velocidad de la luz. Todos los días cae algún gigante. Y no hemos llegado al final. En este circuito, las finanzas son lo hegemónico. Lo productivo, lo industrial, es subsidiario de lo financiero. Las bolsas de valores adquieren el protagonismo. Los medios de comunicación instantáneos abren sus programaciones en cada momento con la evolución de los índices Nikkei, Dow Jones o Nasdaq. De su comportamiento depende la salud mental y económica de muchos inversores. 2.La ética del capitalismo. ¿Qué tiene que ver este capitalismo de la mentira y el fraude con el capitalismo de sus filósofos fundadores, Adam Smith, Benjamin Franklin, Max Weber, Sombart, incluso Marx o Veblen y Schumpeter? En La ética protestante y el espíritu del capitalismo, Weber define el espíritu del capitalismo como el conjunto de elementos éticos que deben inspirar a los empresarios en sus acciones a favor de la acumulación del capital; el capitalismo supone una nueva relación moral de las personas con su trabajo, determinada en forma de vocación. El protestantismo de la Reforma, con una conducta ascética y puritana, tuvo una influencia en el desarrollo del capitalismo. ¿Qué puntos en común encontrar entre los calvinistas de la honestidad, la frugalidad y la preparación y los tíos Gilito que han emergido a la luz pública en los últimos años? Rafael Termes, banquero y miembro de la Real Academia Española de Ciencias Morales y Políticas, ha defendido que no hay contradicción entre el capitalismo y la ética, sino 'que la propia naturaleza del modelo capitalista, bien entendido y bien vivido, fomenta el desarrollo de las virtudes morales, la primera de ellas las generosidad'. ¿O sí, y el abuso forma parte de la esencia del sistema? Es lo que piensan los profesores franceses Luc Boltanski y Éve Chiapello, que han escrito un monumental tomo, titulado precisamente El nuevo espíritu capitalista, en el que sostienen que mientras el capitalismo prospera, la sociedad se degrada, y que el crecimiento de los beneficios es paralelo a la exclusión. ¿Hay una larga y única época de evolución del capitalismo que empieza con el nacimiento del poder mercantil en el siglo XVII y que continúa hasta nuestros días, o, como interpreta el profesor Robert Heilbroner, el capitalismo tiene sus propias discontinuidades, que completan una fase tras otra, asumiendo en nuestro tiempo otras formas, como lo que llamamos nueva economía? Lo que estamos viviendo tiene más que ver con la destrucción creativa que Schumpeter describió proféticamente a principios de los años cuarenta que de la versión ñoña e ingenua de Hayek y los neoliberales. En esta última, el empresario, bajo su responsabilidad, decide qué produce, qué servicios ofrece y cómo lo hace; en la actividad empresarial, es totalmente libre. El consumidor, por su parte, es libre de elegir, de acuerdo con su renta, entre los valores y servicios que le ofrece el empresario. Éste último trabaja en un contexto de libre competencia, inversiones y precios adecuados al beneficio esperado. El mercado proporciona al empresario información sobre la oferta y la demanda, y las coordina. Los productores, independientes entre sí, reciben indicadores de los consumidores acerca de los bienes que deben producir y a qué precios. Aspiran a vender bienes y prestar servicios de la mejor manera posible, vendiéndolos al precio más barato para atraer clientes. Es la smithiana mano invisible del mercado. El contenido del Estado es sólo garantizar al mercado la posibilidad de ejercer su función sin obstaculizar su trabajo y protegerlo de injerencias ajenas. ¡Y los pajaritos cantan y las nubes se levantan! Parece un cuento navideño o una película bienintencionada de Frank Capra. Sin monopolios, sin carteles ni trusts, sin información privilegiada u oculta. Sin mentira. El escritor ruso Alexandr Zinoviev -doblemente disidente, de lo soviético y de lo posterior- dice que esta descripción angélica le recuerda un chiste soviético: la maestra de una guardería de Moscú cuenta a los niños lo maravillosa que es la sociedad soviética; un niño se echa a llorar y la maestra emocionada le pregunta por qué; el niño le contesta que, oyéndola, le han entrado muchas ganas de ir a la URSS. Durante muchas décadas los neoliberales criticaron a los comunistas que decían que el socialismo real no tenía nada que ver con lo que ellos defendían. Ahora es al revés: son los neoliberales los que creen que este capitalismo de amiguetes y fraudes que sufrimos (el capitalismo real) no tiene nada que ver con el verdadero capitalismo. (continuará) Fuente: El País, España ______________________________ 2. Carta de los Provinciales de la Compañía de Jesús a los Ministros de Economía del grupo (G7) sobre la anulación de la Deuda Externa ____________________________________________________________ A los Señores Ministros de Economía del Grupo G7: Como Superiores Provinciales de la Compañía de Jesús, queremos agregar nuestras voces a las expresiones de preocupación con respecto al problema de la deuda que aflige a tantos países pobres. La mayoría de estos países se encuentran en África Subsahariana, pero otras regiones del mundo, notablemente América Latina y el Caribe, se encuentran igualmente afectadas. Nuestros colegas jesuitas en los países del Tercer Mundo dan testimonio del impacto devastador de la crisis de la deuda, sobre todo en los sectores más empobrecidos. La Montaña de la Deuda En muchos países en vías de desarrollo, la deuda externa es inmensa. Por ejemplo, la deuda de los países de África Subsahariana alcanza los $220 billones. Esto representa $365 por persona, mientras que el PNB por persona es tan solo $308. En muchos países africanos, se gasta más en el servicio de la deuda que en salud y demás servicios sociales. La falta de fondos suficientes para los servicios sanitarios y el control de las epidemias se traduce en numerosas muertes, así como la incapacitación permanente de muchas personas, como consecuencia de enfermedades curables. La falta de inversión en la educación resulta en una elevada tasa de analfabetismo. El dinero que debería gastarse en infraestructura básica, salud, la protección del medio ambiente y el desarrollo local se exporta a los países ricos. A veces, los programas de reestructuración, impuestos por agencias financieras con sede en el Norte, han llevado a la desestabilización social y política. El peso de la deuda perjudica gravemente el desarrollo de los países del Tercer Mundo. En África, casi la mitad de cada dólar que se gana en concepto de exportaciones, se gasta en la financiación de la deuda. Aproximadamente la tercera parte de esta suma vuelve a los países acreedores. No debe sorprendernos que los gobiernos africanos se pregunten hasta qué punto les ayuda el aumento de sus exportaciones. Además, de cada dólar recibido en forma de ayuda, el 20% pasa a los acreedores privados. Esta situación frena la reforma de las finanzas públicas, pues los beneficios se pierden en la financiación de la deuda, en lugar de invertirse en los servicios básicos. Aspectos éticos En la situación de necesidad extrema que existe ahora en África Subsahariana, América Latina, el Caribe y otras regiones, no podemos seguir insistiendo en la obligación ética de pagar la totalidad de la deuda internacional. Aunque resulte difícil identificar con precisión a los responsables de la crisis de la deuda sí podemos afirmar que las personas humildes no lo son, y ellas son las más afectadas. Entre los factores más importantes, se puede señalar el persistente déficit presupuestario en los Estados Unidos, que sostuvo una tasa de interés elevada en la década de los ochenta. Al mismo tiempo, hubo un colapso en el precio de las materias primas, y un aumento en el precio del petróleo. Todo esto llevó a la desvalorización de las monedas locales, agravando más todavía el problema de la financiación de la deuda, que se calculaba en dólares. En algunos países, el dinero prestado fue malgastado en proyectos grandiosos, favoreciendo a élites corruptas. Con frecuencia, estas mismas élites se mantenían en el poder debido sus vínculos con una u otra de las superpotencias. A partir del colapso del bloque comunista, estos países han perdido su importancia estratégica, y han quedado abandonados a su suerte. A pesar de que los sectores más pobres de estos países no se vieron beneficiados con el dinero prestado, ahora sienten todo el peso de la deuda acumulada. No habría que olvidar la obligación moral de los países del Norte de ayudar a los del Sur, debido al pasado colonial. No ha habido recompensa alguna por el gran saqueo de recursos materiales y humanos del que fueron objetos éstos. Además las fronteras políticas impuestas por las potencias coloniales, sin tener en cuenta el factor étnico, han sido una causa importante de inestabilidad interna e internacional. La explotación comercial del Sur por parte del Norte es un gran crimen, no solamente histórico, sino actual. Los países del Norte aprovecharon el Sur como fuente de materias primas baratas, pero debido a las tarifas elevadas, resulta muy difícil que los países del Tercer Mundo desarrollen su propia industria. Muchas entidades comerciales radicadas en el Primer Mundo logran controlar los precios en el mercado mundial, perjudicando a los productores y agricultores del Tercer Mundo. En realidad, son los países del Norte que tienen una gran deuda con los del Sur, y no vice versa. Nadie está obligado a ser condenado a la miseria para devolver el dinero a acreedores ricos, y menos todavía cuando la deuda ha sido contratada en circunstancias tan cuestionables. Al contrario, en una situación de tan extrema necesidad, la obligación moral de ayudar al prójimo exige que los a países del Norte apoyen a sus vecinos del Sur. La anulación de la deuda impagable del Tercer Mundo puede significar algunos inconvenientes para los países del Norte, pero estos tampoco serán tan grandes. Conclusión Como jesuitas, entendemos nuestra misión en términos del servicio de la fe, pero la promoción de la justicia forma una parte ineludible de esta misión. No podemos sentirnos en paz con Dios mientras seguimos divididos entre nosotros mismos por la desigualdad, la pobreza extrema y las relaciones injustas. Por lo tanto, queremos apoyar sin reservas la campaña "Jubileo 2000", y otras similares, que piden la anulación inmediata de la deuda impagable del Tercer Mundo. Pedimos que los países del Norte no se contenten con tal medida mínima, sino que se animen a lanzar una campaña concertada de apoyo a los países de Tercer Mundo en su búsqueda de un desarrollo sostenible. Además, pedimos a los países del Norte que se encarguen de ordenar su propia casa, buscando nuevos modelos de desarrollo que no dependan de políticas proteccionistas ni la explotación de materias primas baratas provenientes del Tercer Mundo. Junio 1999 Esta carta fue preparada por el JDRAD (Jesuits for Debt Relief and Development/Jesuitas por el Saneamiento de la Deuda y el Desarrollo http://www.jesuit.ie/drad,) ubicado en Dublín. ______________________________ 3. Privatizar las jubilaciones: el trabajo de los empleados como garantía de la especulación financiera ____________________________________________________________ Alessandro Santoro La campaña por una gradual reducción del papel que cumple el sistema público de jubilaciones a favor del aumento de las jubilaciones privadas se basa en dos axiomas: - el sistema público de jubilaciones se halla en crisis. - la mejor solución a dicha crisis es la apertura del sistema de jubilaciones bajo la forma de previsión de capitalización privada Es necesario analizar atentamente los fundamentos de estas afirmaciones para descubrir el engaño y los peligros que nos acechan. La crisis del sistema previsional público (de reparto) se explica diciendo que las contribuciones procedentes de los trabajadores en actividad no alcanzan para pagar a los jubilados. Se trata de un razonamiento puramente numérico que esconde un análisis incompleto de lo elementos que determinan el equilibrio de un sistema de reparto ( en el cual los actuales trabajadores pagan las jubilaciones de los trabajadores de ayer). Es cierto que dicho equilibrio depende de la relación entre la cantidad de trabajadores activos y la cantidad de jubilados, y de las reglas de cálculo que se apliquen, pero también depende del nivel salarial de los trabajadores activos debido a que las contribuciones previsionales son proporcionales a los ingresos de los asalariados. Los autores de la previsión por capitalización (en primer término los gobernadores de la banca de Italia) tienden a olvidar esta simple consideración, afirmando que el desequilibrio numérico entre trabajadores activos y jubilados impulsa a encaminarse a la previsión por capitalización. ¿Y porqué razón la olvidan? Debido talvez a que si se reflexionara sobre la situación de los salarios se llegaría a la conclusión de que en los últimos veinte años (en Italia como en el resto de Europa) las ganancias en términos relativos han crecido y en cambio los salarios han disminuido, o dicho de otro modo los trabajadores no han podido disfrutar de los incrementos de productividad obtenidos a través de la intensificación de los ritmos de trabajo y la precarización de las condiciones. Es decir que en la práctica la mencionada crisis del sistema público de jubilaciones está determinado no solo por el desarrrollo demográfico natural sino también por le injusta distribución de la riqueza característica de Italia y de otros países capitalistas, en los últimas dos décadas. Sin embargo, aún suponiendo que fuera necesario reequilibrar las cuentas del sistema de previsión público, ¿porqué tendría que buscarse la solución en el sistema de capitalización privado? Este sistema prevé fundamentalmente que el monto de las jubilaciones se vincule a los vaivenes de los mercados financieros para quiénes las jubilaciones se convierten en una forma de inversión bursátil de largo plazo. Esta posibilidad ya existe en Italia bajo la forma de fondos cerrados ( es decir reservados a cierta categoría de trabajadores) o abiertos. Y bien si un trabajador contrata una póliza de capitalización previsional, ningún banco ni compañía de seguros está en condiciones de garantizarla ni siquiera un mínimo nivel de jubilación futura. Es decir que lo que se le está pidiendo al trabajador es que asuma el riesgo de los vaivenes de los mercados financieros; los bancos no quieren correr con los riesgos de las inversiones bursátiles, los derivan simplemente a los trabajadores. El caso Enron es , desde este punto de vista, ejemplificador: la quiebra de esta compañía produjo la quiebra del fondo de jubilaciones que contra toda regla había sido colocado en su mayor parte en acciones de la misma Enron. De modo que los trabajadores, al quebrar la empresa, debido a las oscuras maniobras de sus millonarios dirigentes, no perdieron su trabajo pero vieron evaporarse sus jubilaciones! En otras palabras, estamos frente a otro ejemplo de aquélla v vieja costumbre de los patrones de socializar las pérdidas y de privatizar las ganancias. El desvío de las jubilaciones hacia el mercado financiero tiene otro objetivo evidente: tratar de disimular las razones del conflicto. Desde el momento en que la suerte de las jubilaciones pasa a depender del mercado financiero, el mismo trbajador se sentir cerrar el círculo: luego de haber contribuido a la crisis del sistema público de previsión social, erosionando los salarios y en consecuencia los aportes que financian el sistema, puede utilizar las jubilaciones privadas no solo para intensificar el procesp de financiarización de la economía sino también para poner límites al conflicto salarial. Es necesario oponerse a esta tendencia, acudiendo rápidamente al establecimiento de una estrategia basada en el fortalecimiento del sistema público de jubilaciones a través de una serie de medidas que trastoquen esta lógica. Por ejemplo se podría pensar en:á inhibido de pedir mayor salario porque, se sabe, las Bolsas temen a los aumentos salariales (son inflacionarios dicen) como a la peste. Esto constituye un elemento fundamental del sistema capitalista de los EEUU y tiene importancia no secundaria en la explicación de porqué la Cofindustria (N. de T. Confederación industrial italiana)y los Mercados piden a gritos el fortalecimiento de los fondos jubilatorios. En síntesis con la privatización de las jubilaciones el sistema capitalista intenta 1) Establecer una nueva relación entre salarios y beneficios restituyéndoles a los trabajadores (por vía contractual o fiscal) los beneficios de la productividad. 2) Revisar algunos regímenes previsionales de privilegio 3) Establecer una contribución solidaria (como en Francia) destinada a financiar el sistema público de jubilaciones y pensiones sobre la base de las rentas financieras o a través de la aplicación de 4) 5) un impuesto mínimo a las grandes empresas. ATTAC- Il Granello di Sabbia, nº 62 Traducción S. Merino ______________________________ 3. El accionar del FMI en la Argentina ____________________________________________________________ Naúm Minsburg* Las últimas encuestas realizadas por varias consultoras, difundidas ampliamente por los medios, han demostrado lo que se sabía empíricamente: la mayoría de la gente rechaza los acuerdos que se están tratando de materializar con el F.M.I. Por estas circunstancias es conveniente analizar, aunque sea muy brevemente, la historia de las relaciones de nuestro país con el FMI (creado en 1944), que comienza con el gobierno de la llamada "revolución libertadora" y el primer crédito obtenido fue en 1958, bajo el gobierno del Dr. Arturo Frondizi. Desde ese entonces la influencia del Fondo y de su "brazo derecho" el Banco Mundial, sobre la evolución económico social de nuestro país ha sido de fundamental importancia. Condicionando y supeditando nuestro desarrollo a las conveniencias e intereses de las grandes potencias mundiales, fundamentalmente de los Estados Unidos. Pero pecaríamos de unilateralidad si no viéramos detrás de las condicionalidades del Fondo una clara connivencia con los intereses de los grandes capitales locales y de las filiales de las corporaciones transnacionales, a los que posteriormente se añadirían el accionar del capital financiero internacional. No es el propósito de un artículo periodístico realizar un análisis histórico y pormenorizado. Detengámonos simplemente en los últimos meses. La Argentina ha pasado de ser la alumna ejemplar, el ejemplo de la aplicación incondicional de las directrices del FMI, a constituirse en la "peor de todas". A la que hay que poner de rodillas por haberse atrevido a proclamar públicamente el default , situación en la que se encontraba de hecho. ¿Acaso el FMI no sabía que el modelo basado en una convertibilidad ficticia e impuesta forzadamente y que se basaba en la apertura irrestricta de importaciones de bienes y capitales, que aumentaban exageradamente el endeudamiento externo y en privatizaciones a precios viles y con fuertes indicios de corrupción, no iba necesariamente a un callejón sin salida y podía explotar en cualquier momento? Para poder mantener el modelo "menemista - cavallista - delarruísta" que se caía a pedazos, cuyos resultados están a la vista, y poder facilitar la colosal fuga de capitales que posteriormente se efectuaría, Cavallo contrató para presidir al Banco Central a un alumno educado escrupulosamente por el Fondo, el señor Mario Blejer. El FMI para conceder su "ayuda", comenzó exigiendo un "plan económico sustentable" y que hasta que dicho plan no estuviera efectivizado, la comunidad financiera internacional no brindaría su apoyo a nuestro país. Una suerte de bloqueo increíble en los tiempos actuales. Luego de innúmeras misiones, la última dirigida por el indio Anoop Singh (el mismo que junto a Mario Blejer fueron los autores del desastre de Indonesia) que impuso a los gobernadores la firma del documento de "los 14 puntos" cuya esencia está constituida por el ajuste extremo y eterno. Es sabido que en una crisis económica, el ajuste o la reducción del gasto no sólo empeora la coyuntura puesto que cae la recaudación impositiva, el desempleo adquiere características gravísimas, más de la mitad de la población en pobreza crítica, se produce la destrucción de gran parte del aparato productivo etcétera, la crisis se convierte en un círculo vicioso infernal. Así estamos. El 5 de enero, a muy pocos días de haber asumido Eduardo Duhalde, el fiel discípulo del "cavallismo" Jorge Remes Lenicov y el ministro de la "producción"(¿?) Ignacio de Mendiguren, producen la devaluación de nuestra moneda que en muy breve tiempo se transforma en una megadevaluación, de tal magnitud que no se produjo ni en Rusia, Turquía ni en los países asiáticos. El pretexto esgrimido para tamaño dislate -producido no solamente por la inepcia y los intereses de los que lo impulsaron - era "tornar más competitiva la economía nacional para incrementar verticalmente las exportaciones". Como si la competitividad consistiera únicamente en un tipo de cambio desproporcionado y no mediaran otros elementos como la calidad, la incorporación de tecnología, la seriedad en el cumplimiento de lo convenido, en el respeto de los compromisos, etcétera. Omitieron dichos funcionarios que una buena porción de la producción nacional por culpa del "cavallismo" tiene una gran proporción de insumos importados lo cual influye negativamente en el costo final. Pero la megadevaluación ha pulverizado los sueldos y salarios, la inflación se ha instalado y comienza a perfilarse el peligro de la hiperinflación. ¡ Y el FMI exige que la flotación del dólar sea libre! En las últimas semanas el FMI impone como condición suprema la derogación de dos leyes de trascendental importancia: la ley de quiebras y la de subversión económica. La modificación de la ley de quiebras posibilitará que muchas empresas nacionales puedan ser adquiridas por acreedores externos por valores insignificantes, profundizando el grave proceso de extranjerización de nuestra economía. La derogación de la ley de subversión económica, tiene el propósito exclusivo de proteger de eventuales juicios condenatorios a los directorios de los bancos que actuaron y actúan en lo que hemos denominado como "la mayor estafa de la historia". Esto es el despojo de millones de ahorristas que han sido atrapados en el "corralón infernal". Y que al mismo tiempo han vaciado al país financieramente, tornando sumamente difícil el restablecimiento de un sistema bancario serio y confiable, indispensable para la reactivación de nuestra economía. En definitiva consideramos que las negociaciones con el FMI deberían efectuarse con posiciones de defensa irrestricta de los intereses nacionales, tratando por todos los medios de reestructurar seriamente la deuda externa, realizar un verdadero y efectivo plan para reactivar la economía, superar gradualmente la pobreza, eliminar definitivamente el cáncer de la corrupción y movilizar cabalmente el ahorro argentino, hoy volcado exclusivamente a la especulación cambiaria. (*) Economista. Miembro del Consejo Académico de ATTAC-Argentina. E mail: [email protected] ______________________________ 4. México: El escándalo silencioso de la deuda externa y del modelo neoliberal ____________________________________________________________ Eric Toussaint* Venceremos En 1914, en plena revolución, cuando Emiliano Zapata y Pancho Villa estaban a la ofensiva, México suspendió por completo el pago de su deuda externa. El país entonces el más endeudado del continente, sólo devolvió, entre 1914 y 1942, sumas puramente simbólicas con el único fin de calmar la situación. Entre 1922 y 1942 (¡20 años!) hubo largas negociaciones con un consorcio de acreedores dirigido por uno de los directores de la Banca J.P. Morgan, de Estados Unidos. Entre 1934 y 1940, el presidente Lázaro Cárdenas nacionalizó sin indemnización la industria petrolera y los ferrocarriles que estaban en manos de empresas estadounidenses y británicas, expropió y repartió en forma de ejidos mas de dieciocho millones de hectáreas de grandes latifundios de propiedad nacional y extranjera, reformó profundamente la educación pública. Esta política radical antiimperialista y popular provocó naturalmente la protesta de los acreedores. Pero la tenacidad de México dio resultado: en 1942, los acreedores renunciaron aproximadamente al 80% del valor de sus créditos (tal como estaban en 1914, es decir sin tomar en cuenta multas por los atrasos) y aceptaron unas leves indemnizaciones por las empresas que les habían sido expropiadas (2). Otros países, como Brasil, Bolivia y Ecuador, también suspendieron total o parcialmente los pagos a partir de 1931. En el caso de Brasil, la pausa selectiva en los reembolsos duró hasta 1943, año en el que un acuerdo permitió reducir la deuda en un 30%. Ecuador, por su parte, interrumpió los pagos desde 1931 hasta los años 50. En los años '30, en total 14 países suspendieron los pagos en forma prolongada. Entre los grandes deudores, sólo Argentina reembolsó sin interrupción, después de haber hecho lo mismo durante la crisis precedente, a finales del siglo XIX. Si se comparan los resultados económicos de Argentina en el decenio de 1930 con los de los otros grandes deudores (México y Brasil), éstos fueron por supuesto mucho peores. Con la crisis de la deuda iniciada en 1982 y todavía en curso veinte años mas tarde, la situación cambió profundamente. Los gobiernos latinoamericanos -con la excepción de Cuba- adoptaron en general una actitud de capitulación ante los acreedores. Desde agosto de 1982 y ante la suspensión provisional del reembolso de la deuda mexicana, los acreedores, con la complicidad o la cobardía de los gobiernos latinoamericanos, en general supieron sacar provecho de la situación. Todas las interrupciones en los pagos duraron menos de un año y nunca fueron decididas de manera concertada por varios países. En consecuencia, los acreedores privados pudieron realizar jugosos negocios y el FMI logró recuperar con intereses las sumas puestas en cada caso a disposición de los deudores para que pudieran honrar los compromisos internacionales y continuaran o retomaran los reembolsos. Más importante, los gobernantes y las clases dominantes de América Latina, aceptaron las exigencias de los gobiernos imperialistas acreedores, en primera instancia de la administración estadounidense, y aplicaron medidas económicas neoliberales, que desembocaron en una recolonización de sus países. Las políticas llevadas a cabo en México, en Argentina o en Brasil están determinadas hasta en los más mínimos detalles en Washington sede del Banco Mundial, del FMI y de la administración estadounidense. Lo declara claramente Joseph Stiglitz, el ex primer vice presidente y economista en jefe del Banco mundial, premio Nobel de economía 2001 : « Hoy, el país se enfrenta a una crisis y el FMI le dice que, si quiere más dinero, tiene que hacer tal cosa (.) Hay incluso una farsa permanente, que consiste en que el país redacta una carta de intención, en la que detalla lo que piensa hacer, y la envía al FMI; pero es el FMI el que le ha dicho previamente lo que tiene que escribir. Se lo han dictado.(...) En el FMI no hay más que un país que tenga el derecho de veto: el Departamento del Tesoro de Estados Unidos » (El País Semanal, 23 de junio del 2002) Entre 1982 y 2000, la deuda externa de México casi triplicó (pasando de 57 mil millones de dólares a 157 mil millones) mientras el país pagó a sus acreedores 8 veces lo que debía (según el Banco Mundial, México reembolsó 478 mil millones de dólares). El país reembolsa endeudándose. La deuda externa se vuelve eterna. El pago de la deuda externa mexicana representa, como para los otros países del Tercer Mundo, una enorme transferencia de ingresos de los trabajadores y de los pequeños y medianos productores hacia los capitalistas poseedores de títulos de la deuda externa. Entre los acreedores se encuentran capitalistas mexicanos que poseen una parte de los créditos gracias a los capitales que han colocado en los mercados financieros extranjeros. Mientras el pueblo se empobrece obligado a sacrificarse para pagar la deuda externa, los capitalistas mexicanos se enriquecen de manera inédita. Después de la crisis de 1994-1995, a pesar de discursos propagandísticos de los presidentes Ernesto Zedillo y Vicente Fox, las transferencias de México hacia el exterior han sido enormes, peores que en los años de 1982-1986. Según los datos comunicados por el Banco Mundial, entre 1986 y 2000, México recibió 140 mil millones de dólares en préstamos y reembolsó 210 mil millones. Significa que México transfirió hacia sus acreedores 70 mil millones de dólares más de lo que recibió. El reembolso de la deuda pública externa se hace en detrimento de los gastos sociales (educación, salud, vivienda) y de la inversión publica: el gobierno dedica el 30% del presupuesto público al pago de la deuda externa. En el 2001, el gobierno pagó 29 mil millones de dólares a los acreedores de la deuda pública externa (Fuente: Gobierno, Primer informe de ejecución 2001, página 208 http://pnd.presidencia.gob.mx/pnd/pdf/2001_ie-pnd_203-210.pdf). Si añadimos el costo de la deuda pública interna, llegamos a sumas astronómicas. En 2001, el costo financiero de la deuda pública interna y del Fobaproa-Ipab representó 131 mil millones de pesos mexicanos (unos 14 mil millones de dólares). El total de la deuda pública interna y externa alcanza alrededor de 150 mil millones de dólares (mitad interna, mitad externa). En dólares, el costo de esa deuda representó en 2001 alrededor de 43 mil millones de dólares: una hemorragia tremenda de recursos hacia los capitalistas nacionales y extranjeros acreedores. El tesoro público dedica 2,5 mas dinero al pago de la deuda que a la educación pública en un país en el que, según el presidente de la Confederación Patronal de la Republica Mexicana (Coparmex), Jorge Espina, hay « 32,5 millones de mexicanos analfabetos » (El País, 23 de junio del 2002). Un país en el cual, según el mismo Jorge Espina más de la mitad de la población vive bajo la línea de pobreza. El modelo entreguista aplicado después del 1982 por Miguel De La Madrid hasta Vicente Fox implica entregar progresivamente los ejes fundamentales del desarrollo económico, social y cultural de la nación al gran capital extranjero (sea norteamericano u europeo) en complicidad con los capitalistas mexicanos, manteniendo ellos un cierto control sobre una parte del aparato productivo. Este modelo implica también una degradación profunda de las condiciones de vida de los asalariados, campesinos y demás pequeños productores, del pueblo en general. La venta de empresas públicas implica una pérdida de soberanía nacional y el dinero de las privatizaciones sirve para asegurar el pago de la deuda pública interna y externa. En el 2001, el banco estadounidense Citigroup se apodero de Banamex y en el 2002 Banco Bilbao Vizcaya ganó el control completo sobre Bancomer. La situación económica en México se vuelve nuevamente muy tensa : pérdida de 500.000 empleos desde que empezó la nueva crisis económica en el vecino del norte a inicios del 2001 (90 % de las exportaciones mexicanas salen para EEUU). El Producto Interno Bruto bajó en 2001. El precio del petróleo, como el de otras materias primas, está deprimido, lo que reduce los ingresos fiscales del gobierno con los que se paga la deuda externa. Las presiones contra el peso aumentaron nuevamente a mitad del 2002; las salidas de capitales se aceleraron. Un aumento de la tasa de interés (premio de riesgo país) que paga México sobre su deuda no se puede descartar. En breve, no es improbable una nueva crisis económica y financiera con problemas de pago de la deuda. Sin embargo, la presidencia de Vicente Fox profundiza la política neoliberal de sus predecesores. Con la política de apertura económica total que favorece a las empresas transnacionales, los obreros y obreras, los campesinos y campesinas de México están obligados a competir con los trabajadores de los demás países, cercanos y lejanos. El diario español, El País, lo expresa de manera cruda : « las maquilas, las cadenas de montaje de capital extranjero, que crearon más de un millón de empleos, y constituyen el segundo generador de divisas después del petróleo, pierden competitividad. La razón es simple : los obreros mexicanos ganan tres dólares y medio a la hora, y los chinos o indios, cuarenta centavos » (El País, 23 de junio del 2002). Hace falta romper totalmente con el modelo neoliberal y quebrar el círculo infernal de la deuda. No hay nada ineluctable. Las certidumbres teóricas neoliberales manifestadas hoy en día no valen apenas más que las de los liberales o conservadores al poder en los años 1920 antes del crack financiero. El fracaso económico y el desastre social provocados por los neoliberales de hoy podrían desembocar en nuevos grandes cambios políticos y sociales. La mundialización no es un bulldozer que aplasta todo a su paso: las fuerzas de resistencia son reales y vivas. La mundialización está lejos de haber logrado un sistema económico coherente: las contradicciones en el seno de la Tríada son múltiples (contradicciones entre potencias imperialistas, contradicción entre empresas, descontento social, crisis de legitimidad de los regímenes en el poder, criminalización del comportamiento de los grandes actores económicos). Es más, las contradicciones entre el Centro y la Periferia se refuerzan ya que la dinámica actual de la mundialización es excluyente. Los pueblos de la Periferia constituyen más del 85% de la población mundial: los que creen que van a dejarse marginar sin reaccionar cometen una gran equivocación. Finalmente en el interior de la Periferia, las autoridades que aceptan la vía neoliberal pierden progresivamente elementos de legitimidad (v.g. Fernando de la Rúa en Argentina derrocado por el pueblo en diciembre 2001, Alejandro Toledo obligado en Perú a renunciar a ciertas privatizaciones en junio de 2002). En general, las clases dominantes en estos países no tienen muchas perspectivas de progreso que ofrecer a la gran masa de la población. Frente a esta falta de perspectiva de mejoramiento del desarrollo humano, es hora para los millones de personas y decenas de miles de organizaciones que luchan, de aprender a vivir juntos reconociendo la real complementariedad e interdependencia entre sus proyectos, de organizar y de afirmar la mundialización de las fuerzas de (re)construcción de nuestro porvenir unidos, de difundir la narración solidaria de este mundo. Ya es hora. *Presidente del CADTM (Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo con sede en Bélgica) Julio 11 de 2002 Fuente: Rebelión ______________________________ 6. La privatización: ¿una medida Made in Perú? ____________________________________________________________ Raúl Luna Rodríguez Una tercera parte de la población peruana, se ha expresado de manera activa en contra de las privatizaciones. Las expresiones de protesta y rechazo han abarcado la macro región sur, y en días recientes Junín y Huancavelica, Piura, Talara. En las encuestas el rechazo de la población es del 70 %. Los funcionarios del gobierno han señalado que existe poca información, respecto a las bondades de este novedoso proceso. Sin embargo, esta medida no es muy original, que ahora es propuesta por el actual gobierno. Esta medida es parte de los Programas de Ajuste Estructural que el FMI y el Banco Mundial impusieron a Perú y a América Latina, desde el período de Morales Bermúdez. Un caso reciente es el fracaso de Argentina, que privatizó al 100 %: Argentina aprobó los exámenes del FMI con la mas alta calificación y felicitación, y entró en crisis en los últimos meses. Hoy, es un país en bancarrota. El mito del estado malo y de la empresa privada buena. La evidencia empírica mundial no muestra evidencias que demuestren que el monopolio de la eficacia sea de la empresa privada, contraponiéndola al monopolio de la burocracia, lentitud y poca competitividad de la iniciativa estatal. Frases ideológicas, que se repite hasta el cansancio, y que - sin ningún lugar a dudas - ha calado hondo en el imaginario popular. Pero, ¿es real? ¿O es otro de los tantos mitos a los que han promovido los hacedores de opinión pública?. Los peruanos y peruanas hemos contemplado el desmantelamiento del Seguro Social y hemos visto nacer los seguros de salud y las clínicas. Quienes hacen uso de estos servicios privados hemos podido comprobar que estas Empresas Privadas tienen defectos: largas esperas, mala atención médica, escasez de medicinas, cobros excesivos, no cubren muchas enfermedades, tienen pésimo equipamiento, y han causado muchas muertes por negligencia médica e institucional. Los usuarios tenemos críticas, no vemos una mejora en el servicio. En el mundo, existen experiencias exitosas de empresas estatales: en educación en Francia, Inglaterra, la educación es principalmente estatal, la televisión inglesa es de primera calidad, los sistemas de salud nórdicos ¿no son eficaces? O el sistema de educación japonés - público - ¿no es eficiente? La NASA, seguramente una de las organizaciones de vanguardia en la investigación científico-técnica a escala planetaria, es un ente federal, público, de los Estados Unidos. Son muy eficientes. La educación en Francia e Inglaterra siendo estatal es de calidad. Lamentablemente esto no sucede en Perú. La población peruana no cree, en las privatizaciones Es cierto que hay muchas ineficiencias e ineficacias en el actual desenvolvimiento de las empresas eléctricas y del agua. Es mas cierto que no sólo es consecuencia del mal manejo intrínseco del estado, sino de este estado que hoy día esta tratando de vender sus empresas. De este estado que ha sido corrompido por muchas empresas privadas. También es cierto que muchas empresas privadas hacen lobbie para el desmantelamiento de las empresas estatales, e incrementan la ineficiencia y de esta manera sean vendidas a un precio mucho menor que su valor de mercado. En varios países de América Latina, los estados han jugado un papel "sucio", subsidiando el proceso de privatización, por ejemplo, realizar grandes inversiones previas al momento de venta, despido de trabajadores para entregarle a los nuevos dueños una planilla muy reducida, incrementar las ineficiencias para justificar que el estado es muy mal gerente, en otros casos brindando información que subvalúa los activos. Algunas empresas postoras a la compra han promovido la corrupción de los funcionarios estatales. Privatización o Remate. El gobierno a través de la COPRI ha señalado que las empresas EGASA y EGESUR serían vendidas a 156 millones de dólares, el precio ha sido determinado en base al mismo método de evaluación empleado por el gobierno fujimorista. El presidente de la Comisión de Energía y Minas del Congreso señala que ambas empresas tienen un valor no menor a 260 millones. En la zona sur del Perú, señalan que el valor es de 450 millones de dólares. Ambas son empresas en pleno funcionamiento, no se producirá un período de discontinuidad ni el riesgo de una disminución de la demanda. Debemos recordar que el precio de venta de telefónica, propuesta por el gobierno fue de 500 millones y fue comprada a 2,500 millones. Hoy vemos que este precio, aun fue muy bajo. Otro caso fue el de Electro Andes que la COPRI puso un precio de venta 120 millones y fue comprado a 227millones. La oferta y la demanda no explica esta variación de precios. El problema es el método para valuar las empresas públicas, que siempre las subvalúa, por lo tanto existen responsables de esta subvaluación. La corrupción aun esta presente. Consulta sobre el Modelo Económico No se puede tomar la decisión de privatizar las empresas eléctricas y del agua, sin la opinión favorable de la población involucrada, más aun cuando el gobierno que ha sido elegido, descartó la privatización como una fuente de ingresos para cubrir el déficit fiscal. Para que esta consulta sea un espacio de educación y de decisión se requiere que el estado, las empresas privadas y los usuarios y consumidores tengan espacios y medios, por igual, para hacer conocer sus propuestas y no solo se difunda las propuestas de la Empresa Privada. Los usuarios y consumidores y las diversas propuestas del estado deben ser puestas en la mesa de debates. El principal obstáculo para continuar expandiendo la frontera eléctrica es el reducido nivel de ingresos de la población más pobre del país, que aún no tiene acceso al servicio y esto no se resuelve mediante la privatización. El estado en todos los países del mundo tiene la responsabilidad de brindar servicios básicos a poblaciones pobres, esto no se garantiza con la privatización de los servicios públicos. Cuando en 1991 se inició la privatización en el Perú, las encuestas señalaban que más de las tres cuartas partes de la población apoyaban estas y al respecto existía gran expectativa. Hoy, el resultado es justamente a la inversa: el desencanto de una mayoría de la población ante la privatización es evidente. La suba de precios, el deterioro en la calidad en algunos sectores y la exclusión a los sectores más pobres, explican este cambio de opinión de los usuarios y consumidores. González de Olarte, señala que se ha privatizado la gran mayoría de los activos del Estado en los sectores de finanzas, pesquería y telecomunicaciones, se ha privatizado en otros sectores económicos: por ejemplo, se ha privatizado el 90% de los activos en minería, el 85.5% en manufactura, el 68% en hidrocarburos, el 68% en electricidad y el 35% en agricultura. En conjunto, se ha completado 225 procesos de privatización y/o de concesión, que han generado US $ 6,500 millones de dólares de ingresos para el Tesoro, además de US $ 11,400 millones de inversión prometida, la mayor parte de la cual ha sido realizada. Sin embargo la situación del país y de los consumidores y usuarios no ha mejorado. No todo se explica por la corrupción. El obstáculo es el modelo económico que no permite salir de la pobreza ni satisfacer los intereses y expectativas de los consumidores y usuarios. Artículo enviado por Lino Cerna de ATTAC-ECHLA ______________________________ 7. Derechos económicos, sociales y culturales-Foro Social Nacional: otra Venezuela es posible ____________________________________________________________ La primera semana de julio se realizó en Caracas, el 2° Foro Social Nacional bajo el lema tomado prestado del Porto Alegre: "Otro mundo es posible". Durante cuatro días, activistas y representantes de una diversidad de organizaciones sociales de base e intermedias, debatieron libremente en 9 mesas de trabajo sobre otros tantos temas que las convocaban. Las organizaciones sociales y de derechos humanos que conforman el Capítulo Venezolano de la Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo y la Red Venezolana de Educación en y para los Derechos Humanos, participaron activamente en la Mesa N° 2, donde se debatió sobre el tema: "Derechos Humanos para una política social y participativa". En esta mesa participó un promedio de 40 personas durante toda la jornada, lográndose un acuerdo sobre la necesidad de organizar y movilizar una amplia coordinadora que agrupe a todos los sectores sociales interesados en defender el derecho humano a la seguridad social. A tal efecto, se acordó reunirse todos los lunes, a partir de las 5 de la tarde, en la sede de la Radio Alternativa de Caracas, a fin de coordinar actividades y compartir información sobre la marcha del proceso de aprobación de la Ley Orgánica del sistema de Seguridad Social Integral. Asimismo, se suscribió y apoyó el documento titulado "Nosotros los pueblos creemos que otro mundo es posible", que busca recoger un millón de firmas para entregar a los gobiernos en la Cumbre Mundial de Desarrollo Sostenible a realizarse en Sudáfrica en septiembre próximo. Por otra parte, la Mesa aprobó apoyar y dar difusión a la "Agenda para la Vida y la Democracia" elaborada por el Foro por la Vida y la Red Venezolana de Educación en y para los Derechos Humanos, como material de apoyo para la elaboración por parte del gobierno nacional de un Plan Nacional de Derechos Humanos. En materia de formación, se acordó realizar esfuerzos para apoyar a organizaciones populares del interior del país interesadas en formar multiplicadores de derechos humanos. Finalmente, se apoyó la propuesta de la Juventud Bolivariana de organizar una caminata por los derechos de la juventud y la incorporación de este sector en el sistema de seguridad social. A casi un mes de realizarse el evento, los acuerdos están en plena etapa de elaboración y comienzo de la aplicación, con la participación activa de algunas organizaciones, pero a la que es necesario sumar a muchas otras para solo así hacer posible el desafío de movilizar a la población por la defensa de una Ley de seguridad social que respete los principios constitucionales contemplados en el Artículo 86 de la Constitución. Es evidente, que no bastan las buenas intenciones y las declaraciones, sino que es necesario comprometerse y participar activamente en cada una de las actividades que se planifican. Sólo así será posible una Venezuela distinta, donde el pueblo sea el sujeto principal de los cambios. (Provea, 02.08.02) _______________________________________________ Nettime-lat mailing list [email protected] http://amsterdam.nettime.org/cgi-bin/mailman/listinfo/nettime-lat