Grano de Arena on Wed, 19 Mar 2003 22:01:08 +0100 (CET)


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[nettime-lat] [ATTAC] INFORMATIVO 182 - RESISTENCIA NO VIOLENTA


EL GRANO DE ARENA
Correo de informaci�n ATTAC n�182
Lunes, 17/03/2003
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PDF : http://attac.org/attacinfoes/attacinfo182.pdf
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"Ning�n hombre es una isla, ni est� completo en s� mismo... la muerte
de cualquier hombre me empeque�ece, porque estoy integrado en la
humanidad; por eso no env�es a nadie a preguntar por qui�n doblan las
campanas, porque doblan por ti." Karl Jaspers

En este n�mero

1.- No. No es el petr�leo,  sino la dominaci�n y el reparto del mundo,
como en las dos grandes guerras del siglo XX, lo que est� en juego en
la guerra de Bush contra Irak. O talvez sean las dos cosas!

2.- El petr�leo y la guerra contra Irak. El objetivo de la
Administraci�n Bush es establecer en Irak un gobierno marioneta y
volcar lo m�s pronto posible al mercado petrolero mundial esas
gigantescas reservas; lo que convertir�a al pa�s en uno de los mayores
abastecedores.

3.-El AGCS: un peligro para los servicios p�blicos y la democracia. Un
balance provisorio de las pol�ticas de liberalizaci�n pone en
evidencia que no se ha cumplido ninguna de las promesas relacionadas
con la liberalizaci�n; el imperativo del  beneficio  exige que la
demanda solvente prime sobre los derechos y no ha "mejorado la calidad
, ni el precio ni el  mayor acceso de la poblaci�n" como lo promet�an
los anuncios sobre las ventajas de las privatizaciones en 1980.

4.- Una democracia m�s participativa llega a la UE de la mano de
Grecia. La presidencia griega de la UE ha aprovechado para poner en
marcha un iniciativa que facilita a todos los europeos la posibilidad
de votar y opinar sobre sobre cuestiones que nos afectan. Una de
ellas, es la crisis de Irak

5.- �Qu� habr�a aconsejado Gandhi? La actual crisis de Irak est�
sirviendo para poner de manifiesto que los pol�ticos de todas las
naciones siguen viviendo en la era pre-gandhiana.

6.-  Lula lanza un programa para acabar con el trabajo esclavo en
Brasil: Se calcula que aunque la esclavitud fue abolida hace m�s de
cien a�os todav�a existen en el Brasil muchas personas sometidas a la
esclavitud laboral.

7.- �El planeta no es una mercanc�a ! No dejemos por m�s tiempo el
monopolio de la palabra a los potentes. Ya es hora de proponer que "
un G-mundo " democr�tico se organice para contrarrestar el ileg�timo
G-8

8.- No en nuestro nombre, no con nuestro silencio. Mientras se
instalaba la Corte Penal Internacional, el Pent�gono explosionaba "la
madre de todas las bombas" y Bush bland�a el pu�o frente al mundo
anunciando que los Estados Unidos ir�n a la guerra contra Irak , con o
sin autorizaci�n de las Naciones Unidas.

Citas de los ATTACs




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1.No
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Adolfo Gilly

No es el petr�leo, sino la dominaci�n y el reparto del mundo, como en
las dos grandes guerras del siglo XX, lo que est� en juego en la
guerra de Bush contra Irak. Su primer paso es el control militar y
pol�tico de todo Medio Oriente y, por supuesto, de su petr�leo.

Con su nueva tecnolog�a militar de precisi�n quir�rgica y de
destrucci�n masiva, que en alg�n lado hay que probarla y mostrarla al
mundo, la Casa Blanca y el Pent�gono preparan el primer episodio de
una nueva guerra cl�sica, la tercera guerra mundial.

Su objetivo principal tampoco es Saddam Hussein, a quien como todo
mundo sabe el gobierno de Estados Unidos arm� y apoy� a inicios de los
a�os 80, ayud�ndolo de paso a masacrar a su propia oposici�n
democr�tica. (Eran m�s o menos los a�os del Plan C�ndor en Am�rica
Latina: recuerdan?)

Quien est� en la mira es Europa, la "vieja Europa" continental, la
eventual potencia que podr�a competir en muchos terrenos con Estados
Unidos en el futuro y en el presente. Tambi�n est� Rusia, que ahora ha
vuelto a caer del lado de Francia, repitiendo una vieja historia que
De Gaulle nunca olvidaba. Y, por supuesto, est� tambi�n China con su
creciente zona de influencia en Asia: los c�lculos de la CIA la
esperan como potencia militar mundial tan cerca como 2015. Bush ha
hecho saltar en pedazos sus mecanismos y su legitimidad y no est�
descartada la posibilidad de que el Consejo de Seguridad acabe votando
una resoluci�n de transacci�n que avale la invasi�n de Estados Unidos.

La forma misma en que ese organismo acepta deliberar, con 200 mil
soldados de Estados Unidos ya concentrados en el golfo P�rsico y 60
mil m�s en camino, sin que nadie cuestione la ilegalidad y la
ilegitimidad de esta concentraci�n de tropas mientras el Consejo sigue
discutiendo, muestra el papel subordinado en el cual se coloca la
Organizaci�n de Naciones Unidas.

Nuevos agrupamientos y nuevos equilibrios ser�n necesarios antes de
que un eventual organismo internacional con legitimidad y autoridad
pueda volver a funcionar, qui�n sabe sobre qu� bases y sobre cu�les
ruinas.

Si la oposici�n de Francia, Alemania y Rusia contiene o retarda
todav�a el ataque de Estados Unidos, esto se debe sobre todo a que se
sostiene en una movilizaci�n mundial contra la guerra que,
literalmente, no tiene precedentes. El 15 de febrero de 2003 las
ciudades del mundo dieron la verdadera respuesta a la atrocidad del 11
de septiembre de 2001: no a la guerra, no a la violencia, s� a la paz
y la libertad. Bush y Bin Laden quedaron acorralados en los extremos
opuestos, mientras enormes multitudes (las mayores en los pa�ses cuyos
gobernantes prometen guerra: Nueva York, Londres, Madrid, Roma)
ocuparon el centro de la escena.

La principal y la que finalmente ser� la decisiva entre esas m�ltiples
resistencias es la del pueblo de Estados Unidos. Este pueblo, el mismo
que fue atacado el 11 de septiembre, se est� oponiendo a la guerra en
n�meros crecientes y se resiste a ser llevado a una aventura ciega y
sin salida. La memoria de Vietnam, pese a todo, est� todav�a fresca,
como sigue estando en Europa la de las guerras del siglo XX.

El establishment estadunidense tiene grietas e incertidumbres. Henry
Kissinger declar� que le resultaba "sorprendente" que naciones
integrantes de la OTAN estuvieran actuando en contra de Estados Unidos
y poniendo en duda la veracidad de los informes de Colin Powell: "Esto
nunca sucedi� en los anteriores 50 a�os de controversias, que siempre
se trataron como diferencias dentro de una misma familia". Zbigniew
Brzezinski, por el contrario, dice que la crisis proviene de c�mo
Estados Unidos trata al resto de las naciones, d�ndoles �rdenes como
si formaran parte de un Pacto de Varsovia. "La cuesti�n de Irak es
compleja" y Estados Unidos "nunca, literalmente nunca, ha estado tan
aislado desde 1945."

Uno de los documentos m�s reveladores de la oposici�n a la guerra es
la carta de renuncia a su cargo y al servicio exterior del consejero
pol�tico de la embajada de Estados Unidos en Atenas, John Brady
Kiesling, diplom�tico de carrera desde hace 20 a�os, enviada al
secretario de Estado, Colin Powell. Cito varios de sus p�rrafos, tal
cual fueron publicados en The New York Times a finales de febrero:

Texto completo del documento en

http://alainet.org/active/show_text.php3?key=3247


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2. El petr�leo y la guerra contra IraK
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 Juergen Wagner

El petr�leo, como todo el mundo sabe, es el motor de las econom�as
modernas.

Consiguientemente, su control es desde hace mucho tiempo un objetivo
primario del Gobierno de los Estados Unidos. Y, ante los cambios en la
marcha del mundo, se va haciendo de d�a en d�a m�s importante. Hasta
el a�o 2020, el consumo de petr�leo en el mundo aumentar� en un 50%; y
el de los EEUU., en un 33%. Paralelamente, las reservas mundiales van
disminuyendo. Lo que significa para EEUU. -dado que sus reservas
naturales se han agotado- que el a�o 2020, aproximadamente un 70% de
sus necesidades habr�n de cubrirse por importaci�n; y por lo tanto, la
"protecci�n" de las reservas extranjeras pasa a ser de decisiva
importancia.

Los miembros de la OPEP (Organizaci�n de pa�ses Exportadores de
Petr�leo) disponen de un 78% de las reservas de petr�leo mundiales: la
parte del le�n. S�lo ellos podr�n saciar la creciente demanda de la
econom�a mundial. "Por m�s vueltas que le queramos dar," dice el
semanario alem�n Die Zeit "a los pa�ses de la regi�n del Golfo,
pol�ticamente tan sensible, se les viene por s� solo a las manos un
enorme incremento de poder". La guerra de Washington contra Irak se
dirige en primer t�rmino a poner barreras a ese aumento de poder. La
cuesti�n es c�mo.

El crecimiento econ�mico de EEUU, y el petr�leo barato

En su �ltimo World Economic Outlook, (sept. 2002), el Fondo Monetario
Internacional (FMI) prev� que un aumento duradero del precio del
petr�leo de cinco d�lares por barril (d/b) har�a disminuir el
crecimiento econ�mico de EEUU. en un 0,4%; un aumento de 10 d/b
producir�a seg�n los analistas de Goldman & Sachs un retroceso del 1%.
Con arreglo a estas previsiones, EEUU. considera el bajo precio del
petr�leo como una condici�n necesaria para el florecimiento de su
econom�a. El plan econ�mico del Vicepresidente Dick Cheney dice a este
respecto: "El aumento de los precios del petr�leo viene a ser un
impuesto dictado por los exportadores extranjeros. La subida de los
precios de la energ�a produce costos [...] que pueden poner en peligro
el crecimiento econ�mico". A ese inter�s fundamental de EEUU por un
petr�leo barato se opone una instituci�n: la OPEP.

Ca�da y resurgimiento de la OPEP

En la d�cada del setenta, los once pa�ses de la OPEP, casi todos de la
regi�n del Golfo, intentaron imponer una elevaci�n duradera de los
precios. Como ese mercado mundial se rige tambi�n por las leyes de
oferta/demanda, el c�rtel intent� reducir su volumen total de
extracci�n para hacer subir el precio.

Pero en 1986 tuvo que renunciar a esa reducci�n. Occidente, es decir,
los pa�ses no OPEP, hab�an reaccionado abriendo otros yacimientos -por
ejemplo, en el Mar del Norte- que aportaron al mercado petrolero
mundial grandes cantidades y compensaron as� la reducci�n OPEP. En
consecuencia, el precio medio del petr�leo se mantuvo, con 17 d/b, muy
bajo.

Ahora bien, los yacimientos no OPEP se fueron poco a poco consumiendo,
y hoy est�n casi agotados. Es decir, la hoja est� a punto de volverse.
S�lo los pa�ses OPEP disponen ahora de capacidades adicionales de
extracci�n. Friedemann M�ller, de la fundaci�n Wissenschaft und
Politik (Ciencia y Pol�tica, af�n al Partido Socialdem�crata alem�n),
formula as� las consecuencias: "En marzo de 1999, la OPEP percibi� que
los productores no-OPEP carec�an ya de reservas adicionales, y por lo
tanto no pod�an responder a una reducci�n de extracci�n por parte de
la OPEP. La llave de la reducci�n agarraba de nuevo la tuerca. El a�o
2000, el precio subi� a m�s de 30 d/b. La OPEP hab�a recuperado el
dominio del mercado petrolero que durante los a�os 80 y 90 hab�a
perdido.

El c�rtel estima que mediante la reducci�n va a mantener en adelante
el precio entre 22 y 28 d/b (con clara tendencia al m�ximo). Si
actuara s�lo la ley oferta/demanda, el precio se mantendr�a entre 15 y
16 d/b., opina David Kohl, economista jefe para Europa del Banco
Julius Baer. Y un antiguo ministro del petr�leo de Arabia Saudita,
Ahmed Yarjiari, calcula que sin la reducci�n OPEP, el precio bajar�a
el a�o 2004 a unos 10 d/b. Lo que significa: partiendo de un PBI
(producto interno bruto) estadounidense de aproximadamente un bill�n*
de d�lares, el "impuesto" asignado por la OPEP ascender�a anualmente a
un volumen de tres cifras en mil millones de d�lares. Frente a una
suma as�, los gastos por una sola vez de una guerra contra
Irak -estimados por el gobierno EEUU. entre 100 a 200 mii millones de
d�lares- resultan comparativamente modestos. Sobre todo si se tiene en
cuenta que redundar�n en beneficio de los buenos amigos de la
Administraci�n Bush en los sectores de petr�leo y armamento.

un bill�n = mil millones

La guerra del Irak como torpedo contra la OPEP

En este contexto se advierte en el acto la importancia del petr�leo
iraqu� (con toda seguridad, el 12% de las existencias mundiales; con
probabilidad, claramente m�s). A causa del embargo impuesto por la
ONU, Bagdad s�lo lanza actualmente al mercado mundial peque�as
cantidades. Por eso, un estudio del Center for Strategic and
International Studies llega a la conclusi�n de que una guerra breve y
eficaz contra Irak -base de la que parte el Gobierno EEUU- apenas
tendr�a repercusiones negativas, ni en el precio del petr�leo, ni en
la coyuntura econ�mica estadounidense.

El objetivo de la Administraci�n Bush es establecer en Irak un
gobierno marioneta y volcar lo m�s pronto posible al mercado petrolero
mundial esas gigantescas reservas; lo que convertir�a al pa�s en uno
de los mayores abastecedores. Lo decisivo es que Washington obligar�
al nuevo gobierno a salir de la OPEP y a no atenerse a las reducciones
de extracci�n. La oposici�n iraqu� en el exilio se ha pronunciado ya
de acuerdo. Lawrence Lyndsey, hasta hace poco �ntimo consejero
econ�mico del Presidente Bush, estima: "Si se produce un cambio de
r�gimen en Irak, se podr�an a�adir a la oferta mundial de tres a cinco
millones de barriles por d�a (mb/d). Una guerra eficazmente llevada
favorecer�a a la econom�a." Y un antiguo funcionario iraqu� en el
sector del petr�leo, Fadhil Chalabi, estima que Irak puede suministrar
durante diez a�os hasta 12 mb/d. Si se tiene en cuenta que Arabia
Saudita, el primer productor del mundo, extrae hoy 8 mb/d; y que, con
su capacidad de reserva de 3 a 5 mb/d, ha conseguido hasta ahora
dictar decisivamente el precio, las dram�ticas consecuencias de esa
inundaci�n de petr�leo iraqu� sobre el escenario de los precios saltan
a la vista. Esa previsible inundaci�n no s�lo har�a bajar mucho el
precio, sino que -seg�n las previsiones del Gobierno EEUU.-
desencadenar�a un "efecto domin�". Como Arabia Saudita necesita, para
mantener de alguna manera su equilibrio presupuestario, fuertes
ingresos por la venta de su petr�leo, tendr�a que abrirse, como exige
la pol�tica energ�tica estadounidense, a las inversiones de EEUU., a
fin de lanzar al mercado sus gigantescas intactas existencias y sus
capacidad de reserva. S�lo as� podr�a Arabia Saudita compensar las
p�rdidas de la baja del precio; pero a costa, naturalmente, de perder
la capacidad de controlarlo. Lo que para EEUU. es muy importante,
dadas sus crecientes tensiones con la OPEP, y en especial con Arabia
Saudita, el pa�s m�s importante del c�rtel. La sola reciente retirada
de 250 millardos de d�lares de los 850 de inversiones directas saud�es
ha sido para Washington un fuerte golpe; y s�lo un aviso de otros a�n
m�s fuertes.

El petr�leo iraqu� como fianza

La hegemon�a internacional del d�lar se basa esencialmente en el
llamado "imperialismo del petrod�lar". Henry Liu ha escrito a este
prop�sito en el peri�dico Asia Times: "La aceptaci�n universal del
d�lar se debe a que con �l se puede comprar petr�leo. El reciclaje de
los petrod�lares es el precio que los EEUU. exigen a los pa�ses
productores de petr�leo por tolerar a la OPEP". Hasta ahora, los
d�lares procedentes de compras de petr�leo eran reinvertidos por los
pa�ses-OPEP en EEUU., bien directamente (compra de armas), bien
indirectamente (en divisas). Por eso, las intenciones de Arabia
Saudita de cobrar en adelante su petr�leo en Euros -ejemplo que sin
duda alguna seguir�a los dem�s pa�ses-OPEP- equivalen para EEUU. a una
declaraci�n de guerra: las consecuencias para el papel del d�lar como
divisa mundial -y consiguientemente para toda la regulaci�n econ�mica
de la deuda de EEUU.- ser�an catastr�ficas.

No es, pues, de extra�ar la reciente "consulta" (Briefing en el texto
original) del Defense Policy Board (consejo pol�tico que asesora al
Pent�gono) a Laurent Murawiec sobre la amenaza de ocupar los pozos de
petr�leo del pa�s, en caso de que Arabia Saudita se resistiera a
mantener el comportamiento amistoso para con EEUU. Para poder poner en
pr�ctica esa amenaza se necesita indispensablemente el petr�leo
iraqu�. Porque "ese petr�leo disminuir�a la dependencia de EEUU. de
las exportaciones saud�es; lo que permitir�a confrontar a la Casa Real
saud� con su apoyo al terrorismo" -as� describe el International
Herald Tribune la estrategia del Gobierno erstadounidense. De lo
contrario, la falta de suministros saud�es derivados de tal
confrontaci�n har�a subir el precio del petr�leo a niveles
insospechados. El ya citado Murawiec reconoce abiertamente de qu� se
est� tratando: "Se acusa a Am�rica de hacer una guerra por el
petr�leo. Lo que es una buena raz�n".

Tampoco es pues de extra�ar que Riad haya amenazado con el cierre de
las bases militares americanas en su territorio. Como alternativa, el
planeado estacionamiento de 75.000 hasta 100.000 soldados americanos
en Irak producir� la necesaria presi�n para que los pa�ses de la
regi�n sigan suministrando petr�leo y cobr�ndolo en d�lares. En el
caso de que esos pa�ses no se plegasen, el asesor del Gobierno EEUU.,
Richard Perle habla ya de un efecto domin� a la inversa que
derribar�a, despu�s del Irak, a otros reg�menes rebeldes.

El �rgano del partido gobernante en Washington, New Republic ha
resumido muy bien la estrategia de los "halcones" que hoy dominan la
pol�tica de EEUU.:

"Las reservas petrol�feras iraqu�es tienen que utilizarse para una
reconfiguraci�n del Oriente Medio conforme a nuestras ideas
democr�tico-capitalistas, empleando la incrementada producci�n iraqu�
como palanca para acabar con el predominio saud� en la regi�n, e
incluso para la desintegraci�n misma de la OPEP".

Las "ideas democr�tico-capitalistas" de los Estados Unidos no toleran,
como se ve, ni c�rteles, ni medidas que se opongan a la hegemon�a del
d�lar, y con ello a sus intereses. .Traducci�n: Dr. Eduardo Espert,
ALASEI-Bonn

Fuente: Informativo n�.104 de "Ohne R�stung Leben" (Vida sin
armamento),

Stuttgart/Alemania (ALASEI), marzo 2003 -


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3. El AGCS: un peligro para los servicios p�blicos y la democracia
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Alessandro Pellizzari*

Gracias a la campa�a internacional contra el AGCS comenzada hace dos
a�os, el gran p�blico conoce los peligros vinculados al Acuerdo
General sobre Comercio y Servicios de la OMC: este acuerdo sirve en
primer lugar a los intereses de las empresas transnacionales cuyo
objetivo es obtener ganancias sobre los servicios p�blicos. Estas
empresas se est�n apropiando con cada vez mayor velocidad de una parte
creciente de la econom�a global. Las cifras de la OCDE muestran que
cada a�o se transfieren bienes del sector p�blico al sector privado
por valores superiores a los 150 mil millones de d�lares. Donde m�s
claro se ve es en el sector de las telecomunicaciones: han sido
desmantelados los monopolios estatales pero al mismo tiempo las
telecomunicaciones est�n sometidas a una creciente concentraci�n
internacional. Las disputas entre RWE, E.On y Vivendi por quedarse con
el agua, se est�n desarrollando a escala global. De este modo Las
infraestructuras b�sicas est�n siendo sustra�das al control p�blico y
parlamentario.

Balance negativo de la liberalizaci�n

Un balance provisorio de las pol�ticas de liberalizaci�n pone en
evidencia que no se ha cumplido ninguna de las promesas relacionadas
con la liberalizaci�n; el imperativo del beneficio exige que la
demanda solvente prime sobre los derechos y no ha "mejorado la calidad
, ni el precio ni el mayor acceso de la poblaci�n" como lo promet�an
los anuncios sobre las ventajas de las privatizaciones en 1980. Los
viejos servicios deben competir con nuevos prestatarios y generar
nuevos beneficios: aumentar los precios hasta l�mites aceptables,
suprimir los servicios no rentables, que son sin embargo socialmente
�tiles, eliminar las desventajas competitivas vinculadas a exigencias
de utilidad p�blica o a criterios ecol�gicos. Para bajar los costos de
producci�n, se presiona sobre los salarios y las condiciones
laborales, como se vi� recientemente en el reciente ejemplo de la
empresa Orange. Las inversiones se dirigen a sectores que garantizan
una inmediata rentabilidad, dejando abandonado el mantenimiento de la
infraestructura. Tal el caso de la infraestructura ferroviaria inglesa
o el argumento de sanear las finanzas p�blicas, absolutamente caduco.

Oscuras negociaciones

La presi�n p�blica que intenta sustraer de las negociaciones del AGCS
el sector de los servicios p�blicos logr� que el Consejo Federal
declarara que la educaci�n, la formaci�n, el tr�fico ferroviario y
vial y el correo no constitu�an en Suiza territorios "demasiado
tentadores" Los pedidos de liberalizaci�n seg�n dicho Consejo se
concentrar�an sobre "servicios con alto valor agregado" tales como los
financieros y el turismo. El gobierno suizo se mantiene evasivo en
relaci�n a sus compromisos pero acepta al menos que no incluir� el
servicio de agua "en el campo de aplicaci�n del AGCS" . A menudo se
interpretan estas declaraciones como un compromiso de excluir los
servicios p�blicos en general en las negociaciones del AGCS. Sin
embargo, por las siguientes razones, esto resulta bastante dudoso:

1.El concepto de servicio p�blico es bastante difuso. El Consejo
Federal insiste en que " el Acuerdo no incluye los servicios p�blicos"
si no son provistos sobre bases mercantiles y no compiten con
servicios ofrecidos por otros prestatarios. �Qu� es lo que esto
significa? �La participaci�n de los pacientes en los gastos
hospitalarios no implica acaso una base mercantil? No existen ya casi
servicios gubernamentales como tales. Y a los pa�ses en desarrollo no
les servir� demasiado saber que Suiza solo incluir� sus "servicios
financieros" : ya que la exigencia de desmantelar los mecanismos de
control de los flujos financieros le quitar� la posibilidad de
reglamentar el sensible sector de las inversiones sometiendo a presi�n
a sus sistemas de seguridad social.

2. En lo referente a los compromisos suizos, las exigencias de
liberalizaci�n de los servicios postales, le vienen siendo impuestas
por la Uni�n Europea que persigue pol�ticas de expansi�n en el sector.
Es posible que Suiza est� dispuesta a hacer concesiones tanto en este
sector como en el de los transportes urbanos y el agua. En el a�o 2000
Suiza se hab�a comprometido a no excluir ning�n sector de las
negociaciones, lo que de alg�n modo contribuye a sembrar dudas sobre
las actuales declaraciones del Consejo Federal referidas a la
protecci�n de los servicios p�blicos en las negociaciones del AGCS.

3. Suiza ya ha asumido compromisos relacionados con los servicios
p�blicos en las anteriores rondas de negociaci�n, especialmente en el
terreno de la educaci�n. El Consejo Federal afirma que el AGCS permite
al Estado: "aplicar leyes nacionales a los prestadores de servicios
extranjeros, siempre que las mismas no sean discriminatorias" De modo
que desde el momento en que un servicio est� sometido al r�gimen
establecido por el AGCS, el Estado deber� cubrir compromisos
horizontales tales como el "trato nacional". Este trato nacional
implica que el Estado deber� acordar a todos los prestatarios de
servicios las mismas ventajas otorgadas a las empresas suizas. De modo
que es posible temer que en el futuro los inversores extranjeros
soliciten subsidios estatales bas�ndose en las exigencias de
no-discriminaci�n, con consecuencias desastrosas para el sistema de
educaci�n p�blica.

4. El Consejo Federal pretende asegurar que el AGCS "no ha tenido
hasta el presente efectos negativos sobre los servicios p�blicos
suizos ni sobre los universales". La liberalizaci�n del mercado de las
telecomunicaciones, sin embargo constituye uno de los efectos de los
compromisos asumidos en el marco del AGCS. Separar las
telecomunicaciones de los servicios postales y por lo tanto la
prohibici�n de las subvenciones ha conducido el cierre en masa de
oficinas postales que se observa en la actualidad.

La resistencia sigue siendo necesaria

ATTAC-Suiza junto a otras organizaciones suizas y europeas seguir�
ejerciendo presi�n sobre los gobiernos. La resistencia a la
reestructuraci�n del correo ha demostrado que la poblaci�n se halla
movilizada contra la liquidaci�n de los servicios p�blicos. Durante la
segunda quincena de marzo tendr�n lugar en Suiza una serie de actos de
protesta contra la liquidaci�n de los servicios p�blicos mientras se
realicen negociaciones de la OMC en Ginebra Estas acciones de protesta
servir�n de apoyo a las reivindicaciones que intentan detener las
negociaciones y a exigir la publicaci�n del conjunto de posiciones
defendidas por Suiza en el marco de estas negociaciones

 *Secretario de ATTAC-Suiza


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4. Una democracia m�s participativa llega a la UE de la mano de Grecia
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El mandato de la presidencia griega de la Uni�n Europea no va a pasar
desapercibido para una parte importante de ciudadanos europeos que ya
han comenzado a votar y opinar sobre distintas cuestiones en la web
E-Voto, una experiencia creada desde la presidencia griega para
implicar a los europeos en los debates y toma de decisiones en el
proceso de construcci�n europeo gracias a las nuevas tecnolog�as e
Internet.

Preguntas como �cu�les deber�an ser las prioridades de la UE? �Qu�
papel deber�a desempe�ar la UE en el mundo? o �c�mo deber�a ser la UE
dentro de 10 a�os? son motivo de distintas encuestas abiertas a la
participaci�n de los ciudadanos europeos que no s�lo podr�n dar su
opini�n sino que, adem�s, estas opiniones ser�n tenidas en cuenta en
las sesiones de trabajo diarias de la Presidencia griega de la UE. Al
menos as� lo afirman los responsables de esta iniciativa, en una
demostraci�n de democracia participativa real con la ayuda de
Internet. Sin embargo, las encuestas no se limitan al proceso de
construcci�n europeo sino tambi�n a cuestiones especiales y puntuales
que preocupan a los europeos.

Una de ellas es, c�mo no, la crisis de Irak, tema sobre el que ya han
respondido 72208 ciudadanos europeos -de los cuales, un 63% son
hombres y 36% mujeres, la mayor�a de entre 25 y 39 a�os, con un nivel
de estudios alto- y en la que se revela un rechazo mayoritario (92,9%)
a un ataque contra Irak, a pesar de que un 25,2% creen que
probablemente tenga armas de destrucci�n masiva, y un 48,1% no lo
duda. Seguramente porque adem�s, casi el 80% de ellos creen que la
raz�n principal del ataque tiene que ver con la lucha por el control
del petr�leo y las reservas petroleras. En esta misma l�nea, el 82,3%
considera que sus respectivos pa�ses deber�an utilizar los medios
diplom�ticos en lugar de la fuerza militar y el 75,4% cree necesario
que la UE tenga una pol�tica com�n, con la que todo el mundo est� de
acuerdo, antes de tomar cualquier medida importante.

Fuente: CANAL SOLIDARIO y Los Verdes de Andaluc�a (11.03.03)

Enlace: http://evote.eu2003.gr/EVOTE/en/index.stm


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5. Qu� habr�a aconsejado Gandhi?
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 Gonzalo Arias

No violencia, sati�graha, ahimsa, no figuran en su vocabulario. Siguen
aferrados al funesto axioma "Si quieres la paz, prepara la guerra".
Los que coyunturalmente aparecen ante la opini�n p�blica como m�s
amantes de la paz, insistir�n en la necesidad de agotar las v�as
diplom�ticas antes de recurrir a la guerra; pero no por ello
destruir�n sus propios arsenales de armas nucleares, que
eufem�sticamente calificar�n de simples medios disuasorios.

Parece que los pol�ticos y la mayor�a de los comentaristas se empe�an
hoy en colocarnos en la disyuntiva de una guerra que los pacifistas
ven como criminal o una paz que sus detractores ven como cobarde e
irresponsable. No se oyen voces que sugieran una alternativa de
s�ntesis. �Qui�n osar� proponer una guerra pac�fica o una paz
combativa?

A lo m�s, se habla de prolongar todo el tiempo que haga falta el
tiempo concedido a la diplomacia y a los inspectores de armamentos de
las Naciones Unidas para conseguir el desarme de Irak, pero eso se ve
por los partidarios de la l�nea dura como una muestra de debilidad
ante el tirano. Se invoca el precedente paradigm�tico de las
concesiones de Chamberlain y Daladier a Hitler en 1938, que no
evitaron la guerra sino que simplemente la retrasaron un a�o,
aprovechado por Hitler para acelerar su rearme.

�No es imaginable, entonces, una tercera v�a?

�Qu� habr�a aconsejado Gandhi, el ap�stol de la no violencia?

�l mismo nos da la respuesta. Ya que estos d�as se ha mencionado
repetidamente el fracasado intento de Munich de apaciguar a Hitler con
concesiones, es oportuno recordar el art�culo de Gandhi en aquella
ocasi�n titulado "Si yo fuera checo".

Repasemos sus palabras. Tras una breve introducci�n en la que deja a
salvo la buena voluntad de Chamberlain y Daladier al aceptar una "paz
sin honor", ya que la intervenci�n de Inglaterra y Francia "s�lo puede
significar derramamiento de sangre y destrucci�n en proporciones hasta
ahora nunca conocidas" (cosa que la historia confirmar�a), Gandhi
prosigue as�:

 "Si yo fuera checo, pues, liberar�a a esas dos naciones de la
obligaci�n de defender a mi pa�s. Sin embargo, tengo que vivir. Yo no
ser�a vasallo de ninguna naci�n ni de ning�n �rgano. Tengo que
disfrutar de una absoluta independencia o perecer. Tratar de ganar en
un encuentro armado ser�a una bravata. Mas no lo ser�a si, al desafiar
el poder de quien quiere privarme de mi independencia me niego a
obedecer su voluntad y perezco sin armas en el intento. Al hacerlo
as�, aunque pierda mi cuerpo, salvo mi alma, esto es, mi honor.

Esta paz sin gloria deber� ser mi oportunidad. Debo sobrevivir a la
humillaci�n y conseguir la verdadera independencia.

Pero, dice un componedor, 'Hitler no tiene piedad. Tu esfuerzo
espiritual no servir� para nada ante �l.'

Mi respuesta es: 'Puede que tengas raz�n. La historia no registra
ning�n caso de una naci�n que haya adoptado la resistencia no
violenta. Si a Hitler no le afecta mi sufrimiento, no importa. Porque
no habr� perdido nada de valor. Mi honor es la �nica cosa digna de
conservarse, y eso es independiente de la piedad de Hitler. Pero como
creyente en la no violencia, yo no puedo limitar las posibilidades de
�sta. Hasta ahora, �l y sus cong�neres se han basado en la experiencia
invariable de que los hombres ceden ante la fuerza. Para ellos ser�
una nueva experiencia el enfrentarse con hombres, mujeres y ni�os sin
armas que ofrezcan una resistencia no violenta sin el menor
resentimiento. �Qui�n se atrever� a decir que son por naturaleza
incapaces de responder a las fuerzas m�s elevadas y m�s hermosas?
Tienen un alma igual que la nuestra,' M�s otro componedor dice: 'Lo
que dices est� bien para ti; pero �c�mo esperas que responda tu pueblo
al inusitado llamamiento? Han sido educados para la lucha. Nadie en el
mundo les aventaja en arrojo personal. Pedirles que arrojen las armas
y se preparen para la resistencia no violenta parece vano intento.'

'Quiz� tengas raz�n. Pero yo tengo una misi�n que debo cumplir. Debo
anunciar mi mensaje a mi pueblo. Esta humillaci�n ha penetrado
profundamente en mi para dejarla sin salida. Yo, al menos, tengo que
actuar con arreglo a la luz que ha alboreado en m�.'

As� es como yo creo que actuar�a si fuera checo."

Es f�cil, desde luego, desde�ar estas palabras como las de un
visionario bienintencionado. Pero demos un salto de treinta a�os, sin
salir de Checoslovaquia. Agosto de 1968: los checos sufren de nuevo la
agresi�n de una gran potencia, esta vez de un pa�s supuestamente
amigo, y ninguna otra gran potencia tiene el compromiso de
defenderlos. Gandhi ha muerto asesinado hace veinte a�os, y por
supuesto la nueva generaci�n de checos no tiene idea de sus doctrinas.
Pero he aqu� que ante la invasi�n del ej�rcito sovi�tico, para
sorpresa de los invasores y para asombro del mundo, el pueblo checo
desarrolla espont�neamente una resistencia no violenta y una
desobediencia c�vica que parecen calcadas de las exhortaciones
gandhianas.

El ej�rcito invasor entra en el pa�s sin encontrar resistencia armada
y no tiene dificultad en ocupar los puntos que se creen estrat�gicos.
Pero no puede ocupar las conciencias. La desobediencia generalizada
hace imposible para el invasor el control de la m�quina
administrativa. La televisi�n y las radios oficiales emiten
constantemente consignas de no colaboraci�n, y cuando las emisoras
oficiales son reducidas al silencio son las radios de aficionados las
que toman el relevo. Se evitan cuidadosamente los choques violentos, y
menudean en cambio los di�logos con los soldados rusos, que se
desmoralizan al descubrir que sus gobernantes moscovitas les han
mandado a luchar contra un pueblo pac�fico que quiere realizar el
socialismo a su manera. Se dan casos de suicidios entre las tropas
sovi�ticas. Peque�os sabotajes en las l�neas ferroviarias,
desaparici�n de los nombres de las calles en la capital y de los
indicadores de direcci�n en las carreteras convierten a la ciudad y al
p! a�s en un laberinto en el que las unidades del ej�rcito ruso son
incapaces de orientarse. La infraestructura del propio Partido
Comunista checo sirve para organizar la resistencia pac�fica, y se da
el caso ins�lito de que, a pesar de la ocupaci�n, llega a celebrarse
en la semi-clandestinidad un congreso del partido. La mayor victoria
de la resistencia es conseguir que los gobernantes de la URSS accedan
a reponer en su puesto al presidente Dubcek, que hab�a sido llevado
preso a Mosc�.

Es cierto que todo esto no dur� sino una semana. El propio Dubcek no
estuvo a la altura de las circunstancias, y una vez repuesto fue
cediendo una por una a todas las exigencias sovi�ticas. Pero todos los
analistas coinciden en opinar que la resistencia popular pac�fica
habr�a podido prolongarse mucho m�s y conducir a mayores victorias si
los propios dirigentes no hubieran capitulado.

Queda en el aire, sobre todo, una pregunta a la que nadie ha dado
respuesta. Si en aquella ocasi�n hist�rica el ej�rcito nacional
checoslovaco, cuya raz�n de ser era defender el pa�s, recibi� la
consigna (afortunadamente!) de no salir de sus cuarteles, �por qu�,
todav�a hoy, no se ha sacado la conclusi�n de que mejor que malgastar
los fondos p�blicos en un ej�rcito convencional cuya inutilidad qued�
demostrada ser�a invertirlos en preparar a la poblaci�n para formas de
lucha no violentas que, aunque improvisadas, han demostrado su
eficacia? Reflexionando sobre este y otros episodios hist�ricos (lucha
contra el Apartheid en Sud�frica, huelgas de hambre contra el dictador
Banzer en Bolivia, movimiento sindical Solidarnosc en Polonia,
resistencia al golpe de Tejero en Espa�a, derrocamiento de Marcos en
Filipinas, etc.), iren�logos y polem�logos han desarrollado en el
�ltimo medio siglo una elaboraci�n doctrinal sobre la potencialidad de
las formas de lucha no violentas. Aunque tales reflexiones se refieren
sobre todo a los casos de resistencia popular a un poder tir�nico,
cabe trasladarlas del orden interno al internacional, pues en el mundo
de hoy se debilita cada vez m�s el principio de no injerencia en los
asuntos internos de otro pa�s y cobra fuerza en cambio la idea de un
deber de intervenci�n en defensa de los derechos humanos en terceros
pa�ses.

Existen, en efecto, tanto una elaboraci�n te�rica como iniciativas
que -por supuesto con muchas salvedades y distingos- cabe considerar
como embriones de lo que alg�n d�a podr�a ser una fuerza organizada en
gran escala de intervenci�n no violenta en conflictos internacionales.
Volviendo a la actual crisis de Irak, hay que prestar atenci�n al
impulso que en numerosos pa�ses ha llevado a voluntarios y
voluntarias, a los que se ha dado en llamar "escudos humanos", a
trasladarse a Bagdad como acci�n testimonial en favor de la paz. Damos
por seguro que no son ellos los que van a evitar la guerra. Pero lo
que hay que preguntarse es la fuerza que tendr�an si este movimiento,
de inspiraci�n a veces confusa y no necesariamente no violenta, fuera
organizado con criterios firmemente gandhianos y respaldado por las
potencias que pretenden dirigir el mundo o por las Naciones Unidas.

Otro tanto cabe decir de las diversas organizaciones no
gubernamentales que, en contacto directo con los pueblos oprimidos y
sufrientes, atienden verdaderamente a sus necesidades. Si lo que
pretenden Bush y su gente fuera realmente liberar a los iraqu�es de un
tirano y defender sus derechos humanos, en lugar de movilizar su
maquinaria de guerra ser�a mucho m�s eficaz el apoyo masivo a tales
voluntarios y a tales ONG.

Lamentablemente, tanto los pol�ticos estadounidenses como los de otros
pa�ses, y desde luego los espa�oles, son pr�cticamente analfabetos en
esta cultura de la paz. La situaci�n a este respecto no ha progresado
desde tiempos de Gandhi, quien tambi�n en 1938 escrib�a estas
reflexiones, con las que termino:

"�Qu� hacer con las naciones 'g�ngsters', si se me permite esta
expresi�n frecuentemente utilizada? Hubo en Norteam�rica un
gangsterismo individual. Fue puesto a raya mediante en�rgicas medidas
de polic�a, en los planos local y nacional. �No podr�amos hacer algo
an�logo con el gangsterismo entre naciones...? Si las mejores cabezas
del mundo no han asimilado el esp�ritu de la no violencia, tendr�n que
enfrentarse con el gangsterismo de manera ortodoxa. Pero esto revelar�
�nicamente que no hemos superado la ley de la jungla, que no hemos
aprendido todav�a a apreciar la herencia que Dios nos ha dado, que a
pesar de la ense�anza del cristianismo que tiene 1.900 a�os de
antig�edad y del hinduismo y el budismo que son m�s antiguos, e
incluso del islam (si la he le�do rectamente), no hemos avanzado mucho
como seres humanos."

Fuente: Los Verdes de Andaluc�a


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6. Lula lanza un programa para acabar con el trabajo esclavo en Brasil
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El presidente de Brasil, Luis Ignacio 'Lula' da Silva, lanz� ayer el
'Plan Nacional para Erradicar el Trabajo Esclavo' que consiste en una
acci�n coordinada de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial,
as� como los organismos internacionales y la sociedad civil. En un
breve discurso en la ceremonia de lanzamiento de dicho Plan, en el
Palacio de Planalto, 'Lula' sostuvo que se va a intensificar la
vigilancia para acabar con las formas modernas de esclavitud, al
tiempo que afirm� que a ning�n fiscal le ser� "cercenado" su derecho a
juzgar y castigar a quien opere ilegalmente. Se prev� que todav�a hay
unas 25.000 personas en Brasil sometidas a la explotaci�n laboral que
se asemeja a la esclavitud, abolida oficialmente hace m�s de cien a�os
con la aprobaci�n de la Ley Aurea. "La esclavitud contempor�nea se
manifiesta por la clandestinidad y est� marcada por el autoritarismo,
la corrupci�n, la segregaci�n social, el clientelismo y la violaci�n
de los Derechos Humanos", se�ala la Presidencia brasile�a.

En los dos meses que lleva gobernando 'Lula', ya se han liberado 841
trabajadores esclavos y se los ha indemnizado, en los estados de Par�,
Maranhao, Mato Grosso, Roraima y Piau�, todos ellos en el norte y
noreste del pa�s. La prensa ha denunciado varios casos de diputados
federales, que son a la vez grandes terratenientes, de mantener en sus
fincas trabajadores en r�gimen de esclavitud.

Adem�s de la represi�n y el combate a la impunidad, el Plan Nacional
tambi�n prev� la puesta en marcha de una pol�tica de inserci�n social
para evitar que los trabajadores liberados vuelvan a caer en las redes
del trabajo forzado.

Para ello se pretende llevar a cabo el programa 'Hambre Cero',
prioridad del Gobierno de 'Lula', en los municipios de estos estados
m�s afectados por las reminiscencias del pasado. En total, se prev�n
75 acciones elaboradas por la Comisi�n Especial de Derechos Humanos
para erradicar el trabajo forzado en este pa�s sudamericano.

Fuente: EUROPA PRESS


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7. �El planeta no es una mercanc�a !
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 �Entonces, UTILICE SU VOZ !

El G-8, que re�ne a los siete pa�ses m�s ricos del mundo, adem�s de
Rusia, desempe�a de hecho, el papel de gobierno del mundo, sin
legitimidad alguna.

No tiene mandato de los pueblos del planeta, pero sin embargo impone
sus decisiones y orienta la marcha del mundo. Pone en obra unas
pol�ticas neoliberales que aceleran la concentraci�n de las riquezas a
favor de un pu�ado de personas que tienen los capitales, que
precarizan el empleo y las condiciones de vida de la mayor parte de
los pueblos y favorecen las exclusiones culturales y las destrucci�n
del medio ambiente.

No dejemos por m�s tiempo el monopolio de la palabra a los potentes.
Ya es hora de proponer que " un G-mundo " democr�tico se organice para
contrarrestar ese G8 ileg�timo.

Un " G-mundo para el medio ambiente "

Los ministros de medio ambiente del G-8 reunir�n su pr�xima cumbre en
Angers en Francia los 25, 26 y 27 de Abril de 2003. En paralelo a esa
reuni�n, en Anjou se verificar� otra cumbre ciudadana y pluralista,
abierta al mundo :

Otra cumbre para otro medio ambiente

Este foro ecol�gico mundial estar� abierto para todos los que deseen
construir otro mundo justo, respetuoso de los seres humanos y del
planeta. Exposiciones, talleres, debates y conferencias se
desarrollar�n durante estos tres d�as en el " pueblo del G mundo-medio
ambiente ". Una gran marcha pac�fica tendr� lugar en Angers, a la
tarde del s�bado 26 de Abril. Esta marcha se acabar� por una gran
velada de espect�culos y de fiestas.

�Otro mundo es necesario ! Juntos lo vamos a edificar.

�Todos en Angers para el " G mundo-medio ambiente " del 25 al 27 de
Abril !



" Palabras del G-mundo para el medio ambiente "

�Usted no puede venir � Angers ? Entonces mande sus palabras por mail
o por correo !

�Una sola obligaci�n : todo debe caber en un folio A4 ( 21*29,7cm) !

�El contenido es asunto suyo! texto de propuesta, de contestaci�n, de
testimonio, poes�a, dibujo etc. Todo es posible. Estas contribuciones
podr�n ser integradas en los foros/debates (expuestas, le�das por
actores o proyectadas))

Todas estas "palabras " podr�n ser reunidas a continuaci�n en un gran
libro y difundidas al finalizar el "Gmundo medio ambiente " con las
s�ntesis de los trabajos.

Para mandarlo, una sola direcci�n :

[email protected] �No se le olvide precisar quien es usted y de
donde llega su mensaje !

G-monde environnement - 1 Rue Bardoul -

49000 ANGERS - FRANCIA

Informaciones : www.gmonde-env.org

 <http://www.gmonde-env.org/>


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8. No en nuestro nombre, no con nuestro silencio CONTRA LA BARBARIE
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 Jos� Merino del R�o*

Mientras se instalaba la Corte Penal Internacional, el Pent�gono
explosionaba "la madre de todas las bombas" y Bush bland�a el pu�o
frente al mundo anunciando que los Estados Unidos ir�n a la guerra
contra Irak , con o sin autorizaci�n de las Naciones Unidas.

Bush y sus halcones saben que ellos podr�an ser los primeros en
estrenar la Corte Penal Internacional, acusados de cr�menes de guerra.
De ah� su negativa a reconocer la jurisdicci�n de ese alto tribunal.
Una guerra inmoral e ilegal como la que se quiere desatar contra Irak,
coloca a la dirigencia estadounidense fuera de la justicia
internacional, susceptible de ser acusada, perseguida, juzgada y
condenada por la comisi�n de cr�menes contemplados en la carta
constitutiva de la Corte Penal Internacional. Si la Corte funciona y
Bush va a la guerra, la c�rcel debiera ser el destino final de
personajes tan peligrosos y siniestros.

Eso so�aba ayer en medio de una pesadilla trufada de bombas, gritos y
hocicos de bestias carro�eras hincados en cad�veres de ni�os iraqu�es.
Y al despertar, de nuevo la cara y la voz de Bush, el tonto canalla,
recordando que el Imperio es la ley, y que los que podr�amos terminar
en Guant�namo acompa�ando a los presos de la otra guerra sucia y
terrorista de Afganist�n, o en los cementerios, somos nosotros. El
tribunal que est� en funciones no es el de los derechos humanos, es el
tribunal de la barbarie con la madre de todas las bombas y el padre
Ca�n con la g�ada�a chorreando sangre.

Este asesinato global que se prepara, que podr�a desembocar en el
suicidio tambi�n global, pues no se descarta el uso de la bomba
at�mica, es el impulso de muerte m�s amenazante que enfrenta la
humanidad desde el horror del abismo que se abri� en Hiroshima.
Asesinado el derecho internacional, destruido el sistema de contenci�n
de la ONU, �qui�n detendr� a una dirigencia irresponsable, cegada por
una inmensa e irrefrenable codicia?

La multitud est� en la calle, transformada en el movimiento de opini�n
p�blica y de humanidad consciente m�s formidable de las �ltimas
d�cadas. Las ideas del bien com�n y de la paz, han encontrado millones
de piernas para moverse. Dos fuerzas globales se enfrentan, la una
alimentada de la raz�n y de la esperanza que se apoya en el coraz�n y
en la conciencia de los pueblos, la otra armada de la soberbia y de la
fuerza que cabalga sobre una arrogante maquinaria de guerra.�Qui�n
ganar� esta batalla? �O la perderemos todos?

No tenemos derecho a sentirnos ajenos ni impotentes. Somos, mujeres y
hombres de Costa Rica, parte de esta lucha que se libra en estos
momentos y que ser� decisiva para la vida de todo el g�nero humano.
Hay que tomar partido: bien com�n o barbarie, civilizaci�n o barbarie.
No en nuestro nombre. No con nuestro silencio. Ayudemos a parar la
guerra canalla.

*Escritor y pol�tico costarricense

Crimen y castigo del neoliberalismo boliviano Andr�s Soliz Rada

En los escasos d�as que transcurren del a�o 2003, el gobierno de
Gonzalo S�nchez de Lozada (GSL), ya tiene en su haber 200 heridos
graves y 56 muertos. Treinta y uno de ellos corresponden a los
enfrentamientos armados entre polic�as y militares, ocurridos los d�as
12 y 13 de febrero �ltimos, en las proximidades del Palacio de
Gobierno, de la ciudad de La Paz, y los veinticinco restantes a
v�ctimas de la represi�n en protestas recientes, en diferentes puntos
del pa�s. La ins�lita cantidad de muertos simboliza, de manera
precisa, los resultados de las pol�ticas neoliberales, aplicadas en
Bolivia, desde hace 17 a�os, iniciadas en el �ltimo gobierno de V�ctor
Paz Estensoro (1985 - 1989).

http://www.argenpress.info/nota.asp?num=002251


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Citas de los ATTACs
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http://attac.org/rdv/index.html


19/03
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Triesting + Innsbruck + Wien + Graz
BRITAIN : http://www.attac.org.uk/attac/html/calendar.vm
London
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
Grenoble + Paris + Villeneuve d'Ascq + Saintes + Paris

20/03
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Salzburg + Wien + Bad Zell
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
La Rochelles + Rennes + Paris 18 + St Quentin la Poterie
NORGE : http://www.attac.no/index.php?url=%2Fkalenderliste.php
Oslo + Ntnu-Hist
SUISSE-SCHWEIZ :
http://www.suisse.attac.org/rubrique.php3?id_rubrique=6
Lausanne

21/03
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Salzburg + Gallneukirchen
BELGIQUE-BELGIE :
http://wb.attac.be/modules.php?op=modload&name=Calendrier&file=index
Bruxelles
DANMARK : http://www.attac-danmark.dk/kalender/index.asp
K�benhavn + Storm�de
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
Arras

22/03
AUSTRALIA : http://attac.org/australia/html/calendar.html
Melbourne
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Wien + Jennersdorf
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
Brest + Lyon + Cergy Pontoise
SUISSE-SCHWEIZ :
http://www.suisse.attac.org/rubrique.php3?id_rubrique=6
Lausanne
SVERIGE : http://www.attac.nu/index.php?sc=340,1
Malmo

24/03
AUSTRALIA : http://attac.org/australia/html/calendar.html
Sydney
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Wien
BELGIQUE-BELGIE :
http://wb.attac.be/modules.php?op=modload&name=Calendrier&file=index
Bruxelles
DANMARK : http://www.attac-danmark.dk/kalender/index.asp
K�benhavn + Esbjerg
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
Metz + La Rochelle
SUISSE-SCHWEIZ :
http://www.suisse.attac.org/rubrique.php3?id_rubrique=6
Lausanne

25/03
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Graz + Wien
BELGIQUE-BELGIE :
http://wb.attac.be/modules.php?op=modload&name=Calendrier&file=index
Vielsam
DANMARK : http://www.attac-danmark.dk/kalender/index.asp
Arhus
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
St Brieuc + Lyon + Macon
NORGE : http://www.attac.no/index.php?url=%2Fkalenderliste.php
Oslo

26/03
AUSTRIA : http://www.attac-austria.org/termine/termine.php
Wien
FRANCE : http://www.france.attac.org/annexe/calendrier.php?langue=
Grenoble + Rennes


______________________________

Advertencia: Los documentos publicados no comprometen a la asociaci�n
ATTAC salvo menci�n en contrario. Pueden ser la opini�n de grupos
tem�ticos, personas u otras organizaciones. Se trata solamente de
aprovechar las experiencias y las ideas disponibles para poder
construir juntos ese otro mundo posible, para reapropiarnos de nuestro
porvenir.



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